La madrugada del viernes al sábado se salda con tres personas detenidas por parte de los agentes de la Policía Local de Salamanca.
Las primeras detenciones se produjeron a las 0.41 horas en el paseo del Progreso, donde se estaba realizando un control de alcoholemia. Los agentes de la Policía Local detuvieron un vehículo, porque presuntamente no llevaba correctamente colocado a los niños.
Al informarle sobre dicha infracción, los adultos se negaron a abrir las puertas y terminaron por intentar agredir a los agentes, por lo que fueron detenidos.
Por último, a las 5.53 horas en la calle Jovellanos, un aviso por parte de un ciudadano, alertó a la Policía Local de que un hombre estaba extrayendo combustible de una grúa. Los agentes pillaron con las ‘manos en la masa’ al delincuente y fue detenido por ello.