«La Iglesia no paga IBI, como tampoco los partidos políticos»

Tranquilidad y hospitalidad es lo que transmite durante la charla José Luis Retana, que el pasado 9 de enero cumplió su primer año como obispo al frente de las diócesis de Ciudad Rodrigo y Salamanca. Se toma unos segundos antes de contestar a las preguntas. No rehúsa hablar de la Semana Santa, los párrocos que ya no están, los impuestos, el museo diocesano, el pregonero o la Pontificia. “Salamanca impresiona”, dice.

Plasencia, Ciudad Rodrigo y Salamanca. Las tres diócesis. ¿Cómo somos los salmantinos en el terreno religioso?
Siempre he dicho que es una diócesis que impresiona. He estado en el Aula Magna de la Universidad Pontificia como alumno y presidiendo un acto y eso te conmueve. La primera impresión de Salamanca te conmueve. Es una diócesis que tiene el mismo estilo que todas, personas allegadas y cercanas a la Iglesia y al Señor y personas que viven con otros criterios. Estoy expectante por ver cómo sale la situación.

Tiene mucha piedra Salamanca.
Creo que tiene muchas estructuras externas, las Universidades, las fundaciones, en las que participa la diócesis, la Semana Santa,… Hay asuntos que tienen mucho exterior. Luego, la vida interna de esto, lo componen las personas. Creo que el compaginar ese ‘boato’ externo con la vida cristiana es lo realmente importante.

Y, ¿sus sacerdotes?
Aquí hay sacerdotes muy bien formados. También te impresiona porque los hay con una formación teológica muy fuerte. Lo importante es que ellos no se lo crean. He sido rector del seminario y mi sensibilidad es estar cercano a los sacerdotes. Lo primero que hice en Plasencia fue ver a todos los sacerdotes, uno por uno. Los reunía en el Arciprestazgo, comíamos juntos y después tenía un encuentro con cada uno. Lo he hecho en Ciudad Rodrigo el 10 y 11 de enero y en Salamanca, también por Arciprestazgo. Creo que es muy importante, porque son mis principales colaboradores. Tenemos el problema de la escasez, de la edad y cómo podemos distribuir la tarea de la diócesis entre los sacerdotes que tenemos.

El 9 de enero se cumplió su primer año en las diócesis de Salamanca y Ciudad Rodrigo, ¿para cuándo los nombramientos de los cargos de vicarios y delegados diocesanos?
Hemos renovado el consejo Presbiteral, que es el de los sacerdotes; también el Rectoral, que son mayoritariamente seglares y he pedido nombres para renovar el consejo del obispo, el Episcopal. Los sacerdotes han contestado, estoy contento con la respuesta. Quiero hacer un equipo un poco más amplio. En Plasencia tenía vicario General y Pastoral, pero había un vicario del norte y otro del sur, porque es una diócesis muy larga. Vicario General habrá uno, pero pueden existir vicarios por secciones, algo más amplio, en el sentido de que el consejo del obispo abarque a toda la diócesis. También, alguna mujer. Creo que eso será pronto, pero tenemos que compaginarlo, porque quiero que sea un equipo. Cada uno tendrá su estilo, pero capaces de trabajar juntos.

¿Las dos diócesis?
Hay muchas sinergias que trabajamos en común. Pero, me refiero a los sacerdotes. Si hay ocho en el equipo, en lugar de cuatro, quiero que aunque tengan estilos distintos, tengan la capacidad de trabajar juntos.
Siempre será más plural…
Sí, pero, que sean capaces de captar el bien de los otros. Entre los sacerdotes también tienen sus estilos, sus tendencias,…

¿¡En serio!?
(Risas) El poder trabajar juntos por el bien de la diócesis. Procuraré aquilatar el equipo en esa dirección, que estén todas las sensibilidades juntas.

Hay dos sacerdotes que se han ido este año y eran relevantes. Poli Díaz, que era el número 3 de la diócesis, vicario de Pastoral, y Matías Prieto, canónigo de la Catedral. ¿Cuál ha sido la razón de sus salidas, uno a León y otro a Levante?
(Silencio) En el caso de Matías -Prieto- me lo pidió él. Los dos necesitan recuperarse. La vida del Ministerio tiene muchas tensiones. A veces das más de sí de lo que debieras. Nos puede pasar a todos. Están en un tiempo de descanso,… Veremos cómo los recuperamos.

Tranquilice a la parroquia. Hay preocupación por si estas salidas están motivadas por asuntos más delicados, relacionados con menores o con malversación de fondos.
No.

(Silencio)

Por otro lado. ¿Para cuándo la apertura del museo Diocesano?
Me agrada decir que se va a abrir en vísperas de Semana Santa, cuando concluya la exposición de Mistery Man. Ha sido una fuente de preocupación para el obispo.

¿Por qué?
Porque estás haciendo algo, gastando dinero,… y hay que abrirlo. Pero, tenemos ciertas dudas de que el museo por sí solo fuera ‘rentable’. Aunque la finalidad es catequética y evangelizadora. Hemos hecho una apertura interesante en el que se va a abrir junto con las catedrales, con la misma entrada. El edificio está muy revalorizado y la exposición es muy nuestra, muy de Salamanca y cercanías. Es hermosa. Quizá pongamos algo más contemporáneo en alguna de las salas, para darle mayor empaque. Lo que podía ser un problema, si no se abre y gastas sin abrir, creo que va a ser una oportunidad importante.

La Catedral está gestionada por una empresa, no tiene nada que ver con la diócesis. ¿Por qué esta unión?
La empresa nos ayudaría a la unión.

¿A qué se refiere?
Me explico. Conozco a la empresa de cuando estaba en Ávila de canónigo. Sé por experiencia su profesionalidad, orden,… Cogen a los trabajadores que teníamos, los ‘pulen’,… El secreto va a ser que será el mismo equipo y van a rotar. No habrá dos, un equipo del museo y otro de la Catedral. La idea es la comunión, porque la Catedral la rige el cabildo y es un sacerdote diocesano.

Hablando de los inmuebles de la Iglesia, ¿cree que tendrían que pagar IBI o eso es una decisión política?
La diócesis no paga IBI por sus inmuebles, pero como no lo paga ningún partido político o fundaciones. Todas las estructuras que están proyectadas sin ánimo de lucro no pagan IBI. Está el problema del ICIO -impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras- que sí que se debería pagar, porque no es lo mismo que tú construyas un templo a que edifiques una casa parroquial. La Iglesia tiene ese privilegio, pero al igual que otras estructuras que no tienen ánimo de lucro, como partidos políticos, asociaciones que tienen esa particularidad.

Es el gran canciller de la Pontificia. Hay que nombrar rector/a porque se cumple el segundo mandato de Mirian Cortés Diéguez.
Mirian -Cortés Diéguez- termina el segundo mandato y creo que sí, que puede continuar, pero eso depende de ella. Es una mujer que ha hecho una labor muy buena, aunque tenga sus pequeños altercados. En el momento que entró Mirian era muy complicado, porque la Pontificia no cumplía ninguna normativa de la nueva ley de Universidades. Me refiero a las publicaciones, al número de doctores,… Ha tenido que hacer una tarea muy grande y difícil. Ha hecho una labor muy buena. Si puede el tercer mandato,… Y, siempre que ella quiera. La obligación que tengo como gran canciller es hacer entrevistas a personas. No tengo claro a quiénes, creo que será al equipo directivo, decanos,… Personas con las que tienes que proponer a la permanente de la Conferencia Episcopal tres nombres. Tengo que informarme de cómo está la situación y de quién parecería, porque no creo que haya unanimidad, que pudiera ser un rector o rectora en el futuro.

¿Va a consultar a los profesores numerarios, como han hecho hasta la fecha otros grandes cancilleres?
Sí. Nadie me ha sabido decir con quiénes. Conozco la Pontificia, pero en mi época lo importante era Teología y Derecho Canónico. Ahora, la Pontificia ha crecido muchísimo en otras facultades. Hace unos días vi a una persona y le pedí que me ayudara a discernir a quiénes o cuántos. Habrá que hacer un sondeo amplio.

No le arriendo la ganancia.
Es difícil, porque en estos sitios hay sus pequeñas dificultades intestinas.

Toquemos el tema de Semana Santa. Los cofrades de a pie lo echan de menos en la Semana Santa. Creo que les gustaría que tuviera más presencia.
A ellos les gustaría verme más en Semana Santa. Lo entiendo. Si estuviera solo aquí, asistiría más. La Semana Santa pasada, el Domingo de Ramos lo pasé en Ciudad Rodrigo; el Martes Santo tuve en Ciudad Rodrigo la misa Crismal con los sacerdotes; el Miércoles, en Salamanca; el Jueves Santo lo celebré en Ciudad Rodrigo; el Viernes Santo, en Salamanca; el Sábado Santo, en Ciudad Rodrigo y el Domingo de Resurrección, aquí en el encuentro en la Catedral.
Su deseo está claro, pero doy de sí lo que doy. El espacio y el tiempo son limitados. Sé lo que ellos desearían, pero no puedo estar en la Semana Santa de Salamanca con la asiduidad que ellos querrían.
Mi relación es muy buena con la junta de Cofradías, con el equipo apostólico, me he reunido con todas las cofradías. Siempre, al ser muchos, hay alguna desavenencia entre la misma cofradía, pero no tengo ninguna dificultad, salvo la de coordinar una cosa tan amplia.

¿Qué hay de cierto en los supuestos vetos que dicen que se ha impedido presentarse a cargos de cofradías o no se han ratificado por el obispado cargos elegidos en las asambleas, por tres razones: Estar divorciados, orientación sexual y no estar confirmados?
Hay una normativa en la que parece ser que todas las cofradías estaban de acuerdo, pudieron hacer aportaciones y ahora lo que se trata es de seguir con esa normativa adelante para todos igual.

¿Qué le ha parecido la elección del pregonero de la Semana Santa, el alcalde de Salamanca, teniendo en cuenta que es casi en campaña electoral y sabiendo que hay cofrades de todas las ideologías?
No lo sé. En ese sentido, podía haber sido más fina la elección. Es una época que está en vísperas de la campaña. No había pensado en ello, pero la pregunta tiene su sentido. Por lo menos dar una clara imparcialidad. Es posible que la presencia del alcalde no sea bien vista por otros partidos y otros cofrades. En Ciudad Rodrigo será el prior de los Carmelitas. Tiene más sentido, porque es el año de Santa Teresa, es un año Jubilar. La verdad es que habría que ver la oportunidad de la elección.