El ictus que sufrió Kiko Rivera el pasado mes de octubre supuso un punto de inflexión en su vida. Desde entonces, el DJ ha presumido de llevar una vida sana, sin excesos ni vicios. Sin embargo, ahora le han cazado fumando un cigarro y comiéndose una hamburguesa, lo que parece contradecir sus palabras.
Kiko Rivera volvió “a nacer” el pasado 21 de octubre, el día en que sufrió un ictus, del que ha podido recuperarse. Pese a ello, esto supuso un antes y un después en su vida, que reconoció debía cambiar.
Desde ese momento ha presumido de haber dejado atrás todos los vicios y malos hábitos, que resultan perjudiciales para su salud. “Me he quitado unos kilos, he decidido tomarme la vida de forma más tranquila, no fumo, no bebo, no me drogo”, ha asegurado esta semana en una entrevista en ‘La Resistencia’.
No obstante, estas palabras resultan no ser del todo ciertas. Y es que unos minutos después de la citada charla le pillaron fumando y comiéndose una hamburguesa en plena calle de Madrid, tal y como muestran unas imágenes publicadas por ‘Europa Press’.
En este sentido estas imágenes demuestran que la ‘vida sana’ que supuestamente lleva el hijo de la tonadillera, y así predica en redes sociales, no es precisamente sana.