Una chica polaca ha asegurado que ella podría ser Madeleine McCann, la niña que desapareció el 3 de mayo de 2007. La joven ha argumentando su teoría mostrando varias coincidencias. Ha pedido una prueba de ADN, pero la Policía de Reino Unido y Polonia no le creen.
Madeleine McCann desapareció el 3 de mayo de 2007 cuando se encontraba de vacaciones con sus padres en Portugal. El caso, que tuvo una gran repercusión mediática y nunca llegó a resolverse, podría llegar a su fin. Una joven polaca llamada Julia ha asegurado a través de Instagram que podría ser la desaparecida.
Julia ha creado un perfil en dicha red social llamado ‘@immadeleinemccann’, en el que ha explicado las razones por las que ha llegado a esta conclusión. Además, ha mostrado una serie de coincidencias que sostendrían su postura. Entre otras, ha señalado algunas como pecas en el rostro y las piernas, una marca en el ojo o expresiones faciales.
La chica explica que, pese a no estar completamente segura, está convencida de ser Madeleine. Por ello, ha pedido ayuda a sus más de 630.000 seguidores para contactar con Kate y Gerry McCann, los padres de la desaparecida, y poder hacerse una prueba de ADN.
Sin embargo, tanto la policía de Reino Unido como la de Polonia no acaban de creer a la chica. Así, tal y como ha lamentado los agentes “ignoran” su testimonio. A pesar de esto, Julia ha logrado contactar con los McCann, que han aceptado realizar la prueba genética, según ha confirmado la propia joven.
Esta joven ha revolucionado las redes sociales en la última semana a través de sus cuentas de TikTok e Instagram, en las que ha afirmado ser Madeleine McCann, aportando una serie de evidencias. Además, la chica es adoptada y asegura haber intentado, sin éxito, conseguir una copia de su certificado de nacimiento.
“No había oído hablar de este caso hasta que comencé a hacerles preguntas a mis padres sobre mi infancia, ya que tengo poco o ningún recuerdo de eso. Los recuerdos son todos muy borrosos y cuando he tenido conversaciones con mis padres, las cosas no parecen cuadrar y siempre intentan cambiar de tema”, ha explicado la propia Wendell.
La primera coincidencia entre ambas es que sufrieron abusos sexuales por parte de la misma persona, el alemán Christian Brueckner. “He vivido una vida muy dura y he sufrido muchos traumas, mi abusador era un pedófilo alemán que fue sospechoso en la investigación de Madeleine McCann”, indica la joven.
Por otro lado, señala a evidencias físicas características similares a la niña desaparecida. La más significativa es un defecto ocular hereditario llamado colobama, que se trata de una fractura en el iris. Además, hay otras como pecas en la cara o las piernas, o la forma de los labios similar.
Esta chica ha denunciado su caso ante las autoridades polacas, pero la Policía ha rechazado investigarlo. También ha recibido la misma respuesta de las autoridades de Reino Unido. Entre las dudas que ponen en entredicho la teoría de Wendell, la principal es su edad (21 años), y es que McCann tendría actualmente 19. Además, no es la primera persona en afirmar que es la niña desaparecida.
Finalmente, desde la familia McCann han accedido a hacer la prueba de ADN que solicitaba Wendell, tal y como ha confirmado ella misma. “La familia está dispuesta a analizar todas las pistas. Es importante que observen todos los factores, la niña se parece. No hay duda de eso. Si lo que dice es verdad, hay muchas posibilidades de que sea ella”, ha reconocido una persona cercana a la familia al ‘Daily Star’.
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