Policías naciones detuvieron a un hombre por ocasionar daños en la piscina de un gimnasio, en un Ipad y dos pantallas de la recepción.
Los hechos ocurrieron en la tarde del viernes, cuando un socorrista observó como uno de los clientes rompía de forma intencionada un pulsador-grifo de una de las piscinas, comunicando los hechos a la recepción del establecimiento.
El hombre es cliente habitual del establecimiento y ya había tenido comportamientos agresivos en ocasiones anteriores. El viernes, cuando iba a abandonar el gimnasio, fue interceptado en la recepción haciéndole entrega de una carta en la que la dirección le comunicaba la expulsión por su comportamiento.
El cliente al leer la carta se dirigió agresivamente hacia las trabajadoras que se encontraban en la recepción, y de forma sorpresiva cogió del mostrador un Ipad y lo tiró al suelo, para posteriormente coger uno de las pantallas y lanzarla hacía una de las empleadas, el cual al estar enganchado con el cable, impactó contra otro de los monitores cayendo ambos al suelo no alcanzando a las empleadas, y abandonó posteriormente el establecimiento.
Una vez personados los agentes en el establecimiento se entrevistan con la encargada la cual le expone los hechos ocurridos, haciendo referencia a que los daños ocasionados en el Ipad los valora entre 500 y 700 euros, si bien desconoce el valor de los daños de los dos monitores de ordenador y el pulsador-grifo, facilitándole características del autor de los daños y que éste se había marchado en una bicicleta.
Los agentes localizan al varón autor de los daños en la calle Alfonso VI y proceden a su identificación, siendo posteriormente detenido y trasladado a dependencias policiales.
Una vez finalizados todos los trámites se dio cuenta de los hechos al Juzgado mediante la remisión de las diligencias tramitadas, pasando el detenido a disposición de su titular.
