A la hora de firmar una hipoteca, una condición que, generalmente, exigen las entidades bancarias a los clientes es el pago de una entrada. La cantidad de esta suele corresponder al 20% del valor del inmueble, por lo que, en algunos casos, los compradores no disponen de suficiente dinero ahorrado.
Lograr firmar una hipoteca puede resultar difícil para quienes no dispongan de una cantidad suficiente de dinero ahorrado. Esto se debe a que los bancos suelen exigir el pago de una entrada, una cantidad que generalmente se corresponde con el 20% del valor del inmueble que se va a adquirir.
Por ello, desde HelpMyCash han expuesto algunas fórmulas y consejos a tener en cuenta ya que pueden ayudar a que las entidades bancarias concedan el préstamo hipotecario pese a no contar con ahorros.
En primer lugar, una buena forma de contrarrestar la falta de ahorros es tener un buen perfil. Esto es, tener estabilidad laboral, trabajo indefinido, un salario elevado, antigüedad en la empresa o, incluso, una situación económica buena. Este tipo de clientes tendrán más fácil contratar la hipoteca sin tener muchos ahorros.
Por otro lado, también se puede optar por recurrir a un bróker o intermediario, ya que pueden comparar diferentes opciones y encontrar las hipotecas más baratas. Además, pueden negociar unas mejores condiciones. Según los datos de HelpMyCash, estos profesionales cobran entre el 1% y el 5% del capital de la hipoteca suscrita.
La última opción pasa por adquirir pisos que sean propiedad de los bancos, que suelen concederse con una financiación del total del valor del inmueble. No obstante, este tipo de viviendas no siempre están en buen estado y la oferta suele ser bastante limitada.