Durante décadas albergó una de las tiendas más chic y exclusivas de Salamanca. La moda pasaba por allí. Si querías ser cosmopolita, elegante y sofisticada tenías que atravesar las puertas de Delgado. Una de las boutiques, así se denominaban a las tiendas más exquisitas en los años sesenta, setenta y ochenta, con las que contó Salamanca a finales del siglo pasado.
Al entrar en Delgado, las clientes podían subir o bajar las escaleras y disfrutar con las prendas recién llegadas de los grandes centros de la moda. Un día cerró sus puertas y Salamanca quedó casi huérfana de este tipo de prendas. Rivalizaba por vestir a las salmantinas más elegantes con Senlis, establecimiento que también cerró sus puertas en la avenida de Portugal en pleno barrio de Labradores, después de haber estado abierto más de medio siglo.
Ahora, ese gran local que se encuentra en la calle Vázquez Coronado tendrá una nueva vida, después de años cerradas sus puertas. Sus paredes albergarán una clínica.