El Banco Central Europeo (BCE) ha aprobado este jueves la primera bajada de tipos de interés desde que comenzara una tendencia de continuadas subidas en julio de 2022. Sin embargo, los expertos coinciden en que las hipotecas no volverán a los niveles de antes de la inflación, dado que tampoco esperan que los tipos vuelvan al 0%.
Los tipos de interés oficiales del euro han dejado de estar en máximos históricos después de que el BCE aprobase este jueves la primera bajada en casi dos años, situándose el precio del dinero en el 4,25%. Desde julio de 2022 el organismo europeo inició una senda de fuertes subidas para combatir las elevadas tasas de inflación, pasando los tipos de interés del 0% al 4,5% en apenas un año.
Ahora, tras la primera bajada el BCE advierte que no han iniciado una senda predefinida, sino que irán estudiando los datos que vayan llegando para adoptar nuevas decisiones. Si bien, los actuales niveles de inflación (2,6% en mayo) se están acercando al objetivo del 2% marcado por la UE.
Teniendo esto en cuenta, muchos analistas vaticinan que el banco central baje los tipos al menos una vez más en lo que resta de año. Sin embargo, consideran poco probable una nueva bajada en la próxima reunión del mes de junio. Asimismo, respecto al nivel en el que se estabilizarán los tipos, la mayoría ve lejos una vuelta al 0% previo a las subidas. Frente a ello, consideran más probable un margen entre el 2% y el 2,5%.
Los principales beneficiados de las bajadas de tipos son los hipotecados a tipo variable. En esos casos, cuanto más rápida y acentuada sea la caída, más se abaratarán sus cuotas. De la misma manera, quienes vayan a acceder a un crédito, también obtendrán unas mejores condiciones.
Esto se debe a la interrelación entre los tipos de interés y el euríbor, el principal indicador de referencia para las hipotecas variables. Así pues, cuanto más baje el precio del dinero, menor será el euríbor. En este sentido, los expertos apuntan a que este indicador cierre el 2024 en valores cercanos al 3,2% (actualmente ronda el 3,7%). No obstante, advierten que pese al alivio esperado, las cuotas hipotecarias no volverán a ser tan baratas como antes de la inflación.