Un grupo de exmagistrados del Tribunal Supremo y fiscales jubilados han presentado una querella contra el rey emérito Juan Carlos I por cinco supuestos delitos fiscales que se habrían cometido en las declaraciones tributarias correspondientes a los años 2014 a 2018. De esta manera, dado que las infracciones se habrían producido tras la abdicación del monarca, este ya había perdido la inviolabilidad.
En su querella, los magistrados y fiscales retirados apuntan a la existencia de cinco delitos contra la Hacienda Pública que el exmonarca habría cometido en las declaraciones tributarias de los años comprendidos entre 2014 y 2018. Así pues, consideran que los efectos de la regularización de la situación tributaria que llevó a cabo en 201 se aplicaron de forma indebida.
“Con todo el respeto que nos merece la institución de la Fiscalía General del Estado, en la que está integrada la Fiscalía del Tribunal Supremo, disentimos de su dictamen que considera que la regularización se efectuó correctamente”, exponen, indicando que la Fiscalía informó al rey emérito de que tenía una investigación abierta y de que esos delitos no han prescrito.
Asimismo, creen que la regularización que llevó a cabo Juan Carlos I no debía haberse permitido porque el exmonarca había recibido dos notificaciones previas sobre la investigación, y también se le había ofrecido la posibilidad de personarse en el procedimiento.
Entre los querellantes que han presentado la demanda se encuentran el magistrado retirado del Supremo, José Antonio Martín Pallín, los fiscales anticorrupción jubilados Carlos Jiménez Villarejo y José María Mena, así como periodistas y filósofos.