Con motivo del Día Mundial de la Esclerosis Múltiple (30 de mayo), la Asociación Salamantina de Esclerosis múltiple (Adem), junto con Esclerosis multiple España (EM), lanza su campaña de sensibilización bajo el lema ‘Mi esclerosis múltiple es real, no me la invento’, centrada en la necesidad de conocer, comprender y reconocer la gran cantidad de síntomas que puede provocar esta enfermedad, muchos de ellos invisibles.
Así, Asdem ha salido un año más a la calle este viernes con una mesa informativa situada en la Plaza de los Bandos y actividades abiertas a la ciudadanía, como charanga, su propia versión del juego de ‘Quién es quién’ y una biblioteca humana concebida para que las personas vinculadas a la enfermedad den a conocer sus historias. La agrupación también ha regalado flores solidarias.
Con iniciativas como esta, la asociación de pacientes desea “seguir demostrando que las personas con enfermedades crónicas o con discapacidad son agentes activos dentro de la comunidad y tienen capacidad, valor y mejoría”.
En Salamanca, Asdem, entidad que forma parte del Grupo Asprodes, tiene unos 200 socios en la actualidad y ofrece servicios de psicología, trabajo social, residencia (a través de su vivienda Los Olivos) y fisioterapia, entre otros. Apoya a las personas afectadas en las distintas fases de la enfermedad, desde su diagnóstico, y también a sus familias.
Además, cuenta con una línea centrada en la investigación de productos de apoyo innovadores destinados a mejorar la vida de las personas con discapacidad en sus hogares a través de la tecnología y el asesoramiento para la correcta adaptación de los entornos de vida.
Más sobre la EM
La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad neurológica, crónica y heterogénea que afecta a más de 55.000 personas en España. Esta patología, de la que cada año se diagnostican 2.500 casos nuevos (tres de cada cuatro en mujeres), generalmente se presenta en pacientes jóvenes (la media de diagnóstico es de 34 años), tiene una evolución impredecible y se manifiesta de diferentes maneras, lo que hace que cada caso sea único.
En este sentido, las personas diagnosticadas pueden experimentar hasta 14 síntomas al mismo tiempo. La fatiga, los problemas sensoriales, las alteraciones del sueño, la depresión o cambios de humor y el dolor, son los más comunes. Además, con el tiempo pueden empeorar hasta afectar a su calidad de vida y su capacidad para realizar actividades diarias.
