Salamanca es Patrimonio de la Humanidad y la colocación de las casetas de la Feria de Día suponen para muchos ciudadanos una invasión en el Casco Histórico. Jorge Moro, presidente de la asociación de Hostelería de Salamanca aseguró durante la presentación de la nueva edición de las casetas que van a “proteger nuestros monumentos. Habrá controles policiales para que no se produzca ninguna acción que los pueda dañar”.
No se trata de estar en contra de la fiesta, ni de atacar el ambiente festivo, sino de señalar que el modelo actual es insostenible, descontrolado y absolutamente perjudicial tanto para los vecinos como para el patrimonio cultural de Salamanca.
«Cada año vemos cómo se repiten las mismas imágenes: calles sucias, olores insoportables, terrazas desbordadas, música a todo volumen a cualquier hora, urinarios improvisados en portales y esquinas, y un centro histórico convertido en un botellódromo legalizado. Es indignante. No puede ser que una ciudad Patrimonio de la Humanidad permita año tras año que su centro se degrade de esta forma por falta de planificación, de voluntad política y de sentido común», señala Chenche Martín Galeano, líder de Por Salamanca.
A este respecto, desde el Ayuntamiento de Salamanca señalan que habrá contenedores de plástico, vidrio y residuos orgánicos y que la limpieza se realizara con eficacia con tareas de desengrasado por las noches. Además, estarán operativos 72 agentes de la Policía Local, lo que supone seis más que la pasada edición y se entregarán más de 2.000 pulseras en las que se podrá leer: ‘Con miedo, no hay fiesta».
«Nos parece un insulto que se venda esta feria como un éxito de convivencia cuando lo que realmente hay es saturación, malestar vecinal y un deterioro progresivo del entorno urbano», puntualiza Martín Galeano y añade que durante el año se persiga el consumo en la calle, pero durante las ferias se incentive el descontrol y se aplauda la ocupación masiva del espacio público es una vergüenza política. «Es una doble moral que solo responde a intereses partidistas y turísticos, nunca al bien común», apunta el líder de Por Salamana.
Desde Por Salamanca han propuesto reiteradamente una alternativa: trasladar la Feria de Día al recinto ferial. «Allí hay espacio, condiciones, accesos, posibilidad de montar aseos, escenarios, carpas, transporte público, zonas verdes y todo lo que se necesita para ofrecer una experiencia festiva de calidad, sin destruir lo que nos hace únicos como ciudad. Es una cuestión de sensatez, no de ideología», señalan.
3,50 € el pincho
Este año la Feria de Día contará con 28 casetas repartidas en cinco áreas: Alamedilla, plaza de los Bandos, plaza del Mercado, calle La Rúa -junto a la Casa de las Conchas y La Clerecía- y Rector Lucena.
El precio del pincho de feria será de 3,50€. La inauguración será el 4 jueves a las 13:30 en la zona del Mercado y finalizará el día 15 de septiembre. Los desmontajes se realizarán los días 16 y 17 de septiembre.
El horario de las casetas será de 12:00 a 00.30 excepto vísperas de festivos y festivos que será de 12:00 a 1:00 horas.
Con relación a la música, y como en ediciones anteriores, para mantener el respeto al descanso de los vecinos el horario en casetas será de 12:00 a 16:00 y de 19:00 a 00:00 todos los días.
Actuaciones
El día de Insolamis: el 10 de septiembre a las 12:30 en la zona de la Alamedilla podrán disfrutar los chicos y chicas de la asociación Insolamis y
sorprenderse con los juegos de un mago.
En la zona de la Alamedilla, actuaciones musicales los días 4, 5, 6 y 7 a partir de las 20 horas.
En la zona del Mercado, charanga el sábado 6 y Domingo 14 de septiembre.
En la zona de los Bandos, charanga el domingo 7 a las 14 horas y martes 9, miércoles 10 y sábado 13 charanga a las 19 horas.
7 comentarios en «Los hosteleros de las casetas aseguran que “protegerán los monumentos”»
No se lo creen ni ellos, mentirosos
¿Feria de día? Más bien feria del despropósito
Cada año nos venden la “feria de día” como si fuera el alma de la ciudad, pero lo que realmente ofrece es suciedad por las calles, malos olores, ruido constante y molestias para los vecinos que no tienen más remedio que aguantar. La higiene brilla por su ausencia, y lo único que abunda es el postureo barato de cuatro peperos que se pasean entre casetas creyéndose en campaña eterna. Esto no es una feria, es una caricatura mal organizada que hace tiempo dejó de tener sentido.
Nada más ver la foto de los que presentan la feria de día, se me caen los palos del sombrajo. Parecen la Cámara de los Horrores: los mismos de siempre vendiendo basura envuelta en ruido, suciedad y postureo. Una feria sin alma que solo molesta.
Tranquilos. Van a proteger los.monumentos igual que el propio Ayuntamiento protege la Plaza Mayor. Estamos salvados.
Bienvenidos, un año más, al maravilloso mundo de la diarrea.
Tranquilos que ahora el de los tacos de la plaza anuncia que se postula a la presidencia de la asociación y que todo va a cambiar.
Como todos los años me voy de Salamanca en estas fechas, hasta el día 22 paisanos.