Opinión

Cincuenta y dos

[dropcap]52 [/dropcap]¿Por qué 52 y no 50? ¡Acertasteis! Porque 52 es el número de semanas en un año… y 52 el que hace esta ocurrencia mía en el periódico digital que me acogió para entreteneros hace, pues eso, 52 semanas, un año.
Y en ese devenir del tiempo la Tierra ha dado 365 vueltas alrededor de su eje N-S y, sólo una al del Sol, y… ¿Y qué más? Pues han pasado muchas cosas, la mayoría sin girar, unas buenas y otras no tanto; parece que muchas malas. ¡Que «cada cual cuenta en la verbena según le va en ella», o «todo es según el color del cristal con qué se mira», o…! Y así podría seguir soltándoos refranes, todos de una gran sabiduría.

¡Ánimo, y a seguir dando vueltas, Tierra!

Emiliano Jiménez, un precioso bebé de siete meses.

A lo largo de estas 52 semanas he procurado cumplir con mi compromiso distractor. ¿Lo he conseguido? Vosotros tenéis la palabra. Unas veces lo hice con relatos sobre cosas que me han pasado, o que he oído. Otras, con disquisiciones seudofilosóficas. Otras, con enseñanzas. ¿Qué os gustó más?

Sea cual sea vuestra respuesta os puedo asegurar, y os aseguro (esto lo digo imitando a alguien, que lo decía con el verbo «prometer»), que cada semana he puesto el alma en mis dedos, estos en el «boli» y éste en el papel. Y del papel digital ha pasado a vuestra mente, a vuestra alma, que se ha fundido con la mía, al leerme.

¡Sí, queridos amigos! ¡Mi alma es ahora vuestra! Puede que siempre lo fuese, pues en esto de la relación letra-ojo quizás el pasado se diluye en el presente y éste en el futuro. ¡En un toque de eternidad! Ya lo dijo Unamuno, el eterno Unamuno.

Pero ¿sólo él goza de la eternidad? ¡No! Lo que ocurre es que es muy conocido por su gran magisterio, por su gran estilo. Pero los demás que ponemos el alma en un papel… ¿es que no vamos a disfrutar de la eternidad porque dentro de unos años hayamos caído en el olvido público?

¿No os dais cuenta de que en esa eternidad están los anónimos autores de las pinturas en las Cuevas de Altamira, las almas de todos aquellos que, en las paredes y techos rupestres, nos quisieron decir algo? Y las de las inmensas muchedumbres que, desde que el Hombre es Hombre, han dejado su ser al plasmar sus pensamientos, sus sentimientos, sus ideas u ordenanzas para que los demás las comprendan al ver la pared o techo, la estela, el papiro, el ladrillo, el pergamino, el papel…

¡Papel…! ¡ Compañero del alma! Dicen algunos que no tardando mucho ya no te usarán como intermediario entre los Hombres. ¡Ocupas espacio! Pensándolo bien, ¡también nuestros cuerpos ocupan un espacio!

¿Pasará también el papel, como nosotros, a la otra orilla? Seguro que allá, donde todos iremos sin excepción, encontrará acomodo en las eternas bibliotecas celestiales, donde habrá perdido la perecedera celulosa y conservará su esencia, el alma del que en él escribió, fundida con la de todos sus lectores. Amén.

14 comentarios en «Cincuenta y dos»

  1. Emiliano, gracias por tu tenacidad, pero yo recuerdo algunas felicitaciones de Navidad con información que te sugiero reenvíes , tal como el polígono .?.? ….en la ca terral de Salamanca
    Ya tenemos la primavera, mi casa y jardín está a vuestra disposición para sí te conviene que tu mujer y tu disfrutéis de lo que tenemos, c/La Moral del rio número. 1, Villamayor
    Un abrazo
    Marcelino

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    • Muchas gracias, Marcelino. También yo creo que se debería hacer hincapié en el Salamancaedro de la Catedral. Descuida que lo voy a hacer.
      Un abrazo
      Emiliano

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  2. Qué bonito Emiliano, qué bien te ha quedado el escrito de hoy. Por eso a tu pregunta sobre qué nos gustó más a lo largo de este año que ha pasado tan pronto, tengo que contestarte que todo ello nos gustó. Las bromas y las veras; los artículos académicos y los populares; todo lo que has escrito. Por lo variado que es, por lo personal y por lo humano. Porque lo has escrito para que lo leamos con gusto, aprendiendo a veces, disfrutando otras. Por eso con gusto te contesto: todo me gustó y mi deseo y ruego es que sigas escribiendo con la bendita libertad que te caracteriza y que es un bien muy escaso en estos momentos. Por favor Emiliano sigue escribiendo de todo aquello que te venga en gana. Un abrazo de un amigo y lector agradecido,

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    • Querido casitocayo: te agradezco esas palabras tuyas, llenas de cariño. Me reconforta saber que llegan a vosotros y que las tomáis con el espíritu con que está escrito: de un alma que quiere dar salida a sus pensamientos, con toda mi buena intención.
      Un abrazo
      Emiliano

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    • Querida Domi: muchas gracias por esos retitos que sacas de tiempo y de tu corazón. Para corazones como el tuyo escribo.
      Un abrazo
      Emiliano

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  3. ¡Enhorabuena por tu talento y gracias por compartir tu enorme sabiduría y bagaje de experiencias en tus artículos!
    Esperamos muchas más «ocurrencias».
    Por cierto, recuerdo el artículo sobre la caravana que me encantó, así como los relacionados con los viajes y aventuras de juventud. Aunque, realmente, todos me parecen sumamente interesantes, amenos e instructivos.
    Un fuerte abrazo.

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    • Muchas gracias, querido Armando. Ese espíritu observador y viajero que te caracteriza fue mi guía durante mucho tiempo. A veces pienso en aquellos tiempos, pero no me da tiempo a echarlos de menos. La vida hay que vivirla plenamente y con la sonrisa en los labios, siempre, por muchos obstáculos que se pongan por delante.
      Un abrazo, Armando

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  4. Feliz aniversario!…Yo he disfrutado mucho con tus artículos ,cada uno con su matiz , y tras ellos estás Tú, tu alma ,tus sentimientos,tu saber….
    Mi admiración hacia tí…Hoy siento yo esa poesía que compartimos,llena de sentimientos…¿Sábes por qué?..sí ,eso que unió nuestros sentimientos!… Gracias por nuestra amistad.

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    • Gracias a tí una vez más, Azuzena. Una y mil veces diré a gritos que lo más hermoso del mundo es la amistad, el amor, los buenos sentimientos. ¡Y de eso tu alma está llena a rebosar!
      Gracias, gracias, gracias, Azucena

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  5. hola Emiliano, y gracias por tus escritos y ocurrencias. qué vivo estás! qué gracias tienes en hacer llegar las cosas más sencillas.
    qué bien escribes!.
    sigue igual, otras 52 o más las que tu quieras.
    unabrazo muy fuerte
    carmen

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  6. Muy ameno, directo y pedagógico como es de esperar de un profesor como tu. Durante estas 52 semanas nos has enseñado y entretenido con tus «ocurrencias». Te seguiremos hasta que tu lo desees.
    Uno de tus alumnos.

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  7. Muchas gracias por seguirme, querido alumno. Te he de confesar que me da pena no haber tenido este medio de comunicación hace 50 años. ¡Ahora iríamos por la ocurrencia 2.600 y pico! ¡Qué barbaridad!
    Un abrazo
    Emiliano

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