El Estado, a través del FROB (Fondo de Reestructuración y Ordenación Bancaria), ha entrado en la capital de CEISS (Caja España de Inversiones Salamanca y Soria) con una participación que ya alcanza el 9 por ciento como consecuencia del cumplimiento de los acuerdos suscritos entre el fondo y Unicaja durante las negociaciones para la adquisición de la entidad castellana por parte de la andaluza y evitar, de este modo, su nacionalización.
La participación del FROB en CEISS es la suma del 1,16 por ciento del capital que ya tenía el fondo en su poder a finales de 2014 y el 8,09 por ciento que ha añadido al asumir su parte en la devolución de las inversiones que los preferentistas y tenedores de obligaciones subordinadas reclamaron ante los tribunales, según informa el portal eleconomista.es.
CEISS ha devuelto ya 151 millones de euros para cumplir las sentencias favorables a los preferentistas, pero de el FROB debe asumir el 70 por ciento, tal y como se acordó durante las negociaciones para que Unicaja se quedara con la caja castellana, con un límite máximo de 241 millones de euros.
Es previsible que la participación del Estado en CEISS aumente sensiblemente en los próximos meses, a medida que vayan saliendo las sentencias favorables a los preferentistas que acudieron al juzgado para recuperar su dinero. A finales de 2014, los preferentistas y tenedores de obligaciones subordinadas tenían en su poder, sin saberlo, el 26% del capital de CEISS en esos productos tóxicos. Son los ahorradores que no aceptaron el canje propuesto en su día por Unicaja.
Si el FROB acaba poniendo más de 241 millones de euros cuando salgan las sentencias pendientes CEISS deberá comprar la cantidad excedentaria al fondo de rescate a partir de 2018.