Óscar de Alonso Ortega, gran maestro de la Logia de España y serenísimo gran maestro del Gran Oriente Español ha sido el encargado de inaugurar la Logia Helmántica. La Masonería vuelve a tener una Logia en Salamanca, cerrada en la Guerra Civil
Uno de los objetivos de los masones es el perfeccionamiento moral de la humanidad. ¿Por qué creen que están capacitados para esta encomienda?
Nosotros no somos un movimiento ilustrativo que pensamos que tenemos la verdad absoluta de todo y que los demás son unos ignorantes y tenemos que enseñarles lo que es la vida. Somos una orden iniciática. Buscamos que buenas personas se conviertan en mejores personas. ¿Tenemos nosotros la clave de esto que parece sencillo pero es complicadísimo? No. Además, no somos los únicos. Hay desde religiones, instituciones,… la meditación transcendental, el yoga,… mil cosas que también logran que los individuos se perfeccionen como personas. Nosotros somos una opción más, que creemos que es la buena. Hay muchos hermanos que han probado otras posibilidades y se han dado cuenta que la masonería es lo que más le conviene.
¿Qué le aporta a su persona ser masón?
Para mí forma parte de mi vida, somos unos 2.500 masones en nuestro país. Estoy muy a gusto, pero entiendo que a otras personas que prefieran colaborar con Cruz Roja y estén bien, igual que yo o más. La masonería no tiene la clave de todo, no somos una piedra filosofal, somos sólo una opción más.
Pocas organizaciones, salvo algunas órdenes religiosas han sobrevivido como ustedes desde la Edad Media. ¿Goza de buena salud la masonería?
En España no gozamos de buena salud. La Masonería se define como es la Fraternidad Iniciática más antigua del mundo. Nosotros nos diferenciamos de otro tipo de movimientos por nuestro carácter iniciático, que conservamos de la Edad Media. En la religión no te inicias.
Háblenos de los ritos masónicos.
Los masones juramos dos cosas: No revelar la identidad de otro masón y no podemos contar o explicar aquellos rituales que se viven, se escuchen, se realizen,…
¿Por qué?
Los rituales están en Internet, te encuentras de todo, pero no es lo mismo ver una película, donde ves un acto sexual que vivir el amor con la persona que tú más quieres. Lo otro lo puedes ver en una pantalla, que no te dice nada, y el contacto personal es lo que hace vivir y que entre en tu corazón. Eso es la Masonería, aunque tú leas, te expliquen lo que es, lo importante es vivirla y experimentarla. La iniciación es única en la vida, es la primera vez que te va a ocurrir y si es hermosa te va a dejar una huella imborrable en tu alma.
¿Por qué cree que causa tanta curiosidad a la sociedad conocer estos rituales?
Es un acto íntimo, donde se realiza en un lugar determinado, donde sólo unos elegidos están convocados, donde sólo accede una persona que es merecedora de esos misterios y privilegios que los pueda recibir y los recibe tranquilamente sin tener que estar pensando si esto va a salir en la televisión o en youtube. No podemos explicarlo, ni es bonito hacerlo. Pero, en Internet está todo.
Y, ¿se asemeja a la realidad?
Cuando me viene un candidato a mi Logia y me dice: ‘He leído un libro’. Siempre le digo que no lea más, porque al final me agradecerán no haberlo hecho, porque esperaran con sus ojos vendados lo que es la ceremonia de la iniciación.
¿Qué cualidades tiene que tener un candidato?
Los candidatos tienen que ser hombres, creyentes, no aceptamos ni ateos, ni agnósticos, libres, de buenas costumbres,… Estos son fundamentalmente los requisitos.
¿Creyentes en qué religión?
En la que quieran. La Masonería te pide que seas un buen creyente en la tuya y que practiques tu religión. ¿Por qué? Porque nuestros trabajos se abren y se cierran a la gloria del Gran Arquitecto del Universo, sea Dios, Ala, Yahveh ,… Porque todos son el mismo. Hace 400 años la Masonería era la única organización donde podían estar personas de diferentes creencias. Podían convivir y trabajar masónicamente cristianos, judíos y musulmanes. Eso era impensable salvo en las Logias, ya que estaba prohibido.
No aceptan mujeres, pero ¿homosexuales?
Sí. Nosotros no preguntamos en qué Dios creen, ni a qué partido político votan, por lo que nos da igual con quién se acueste una persona.
Ha hablado de dedicarle tiempo, ¿cuánto tiempo?
Depende de cada uno. En mi caso, mucho. Mi mujer me dice que abandono a la familia y al trabajo y tiene toda la razón. Un masón normal dedica una o dos veces al mes a la Masonería, pero hay que tener en cuenta que un masón es 24 horas al día. Ese es el compromiso que se te pida. Tienes que trasladar unos principios masónicos que se te enseñan en la Tenida, en la Logia, en la reunión, basados en el honor, la verdad y la justicia, entre otros muchos, como el trabajo, la ayuda mutua, la solidaridad,… Todo esto lo tienes que practicar en casa, en el trabajo, en la convivencia social,…
¿Cuantas reuniones tienen?
Una o dos veces al mes, depende de la Logia. En la mía, en Valencia, nos reunimos una vez al mes.
¿Cuánto tiempo investigan al candidato?
Unos meses. Se le hacen varias entrevistas, se le piden antecedentes penales, como en cualquier club importante. La gran diferencia es que aquí no es entrar, pagar la cuota y dar una foto, esto es algo más. Aquí intentamos que la persona que entre, se quede. El que se va es un fracaso, para la institución y para el que abandona.
¿Qué opina de la Logia que hay en el Archivo General de la Guerra Civil?
La Logia de Franco tiene los elementos reales, pero está dispuesto de una manera un poco grotesca. No me quejo de eso, pero sí de los antifaces, de las capuchas y de los ojos enrojecidos. Eso da una sensación un poco cavernícola, terrorífica de lo que es la Masonería. Bien es cierto que hubo, durante un tiempo, en determinados rituales que aparecía el que se llamaba el hermano Terrible, que es cuando el candidato abre la puerta, un hermano, para no ser reconocido llevaba un antifaz o una capucha, pero no lo llevaban todos. Cuando haces de eso que es una excepción y para determinados rituales, algo que pasaba siempre, estas tergiversando la realidad y lo conviertes en grotesco. Estamos negociando con el Ministerio de Cultura hacer, donde está la exposición masónica, quitarla y hacer allí la Logia Helmántica, para hacer un templo de hoy día, del 2015.
¿Convivirían las dos Logias, la de Franco y la actual?
Sí, eso es. El turista o el salmantino que se acerque verá lo que dispuso Franco y también un templo como lo monta la Gran Logia de España. Ellos verán que está activa y para un museo tener un lugar activo que está totalmente implicado dentro de la sociedad es estupendo. Es una idea de Rogelio, el antiguo director general de Cultura. Así, se compararía las dos Logias y tendrían una vivencia doble.
Tienen una miscelania en cuanto a profesiones. ¿Eso hace que sea más rica?
La Masonería es un reflejo absoluto de la sociedad, tanto en lo bueno como en lo malo, en lo diverso,… Solemos venir de profesiones liberales. Dentro de la reunión hay un oficio que es el Guardatemplo Exterior que se queda fuera de la Logia. Simbólicamente, tiene que guardar todos tus defectos, carencias, envidias, negatividad,… todo esto lo dejas fuera. Lo maravilloso que tiene la Logia es que estás con un director general multimillonaria sentado a tu izquierda y a tu derecha, un fontanero, y todos son iguales. Todos pasan por el nivel. Todos están aplomados y es maravilloso que el director general sirva el vino al fontanero, porque le toca servir ese día el vino en el ágape.
¿Cómo una sociedad aparentemente ‘secreta’ convive con las redes sociales donde todo está expuesto?
Magníficamente bien. Intentamos convivir, porque o te acercas a la montaña o ella no se va a acercar a ti. Hay un equipo de comunicación, estamos en las redes sociales, tenemos una web, una newsletter que sale los lunes a las ocho de la mañana, donde damos bits de información que llegan a toda Latinoamérica y se envía a 5.000 direcciones electrónicas, de las cuales sólo 1.500 son masones, los otros 3.500 son ministros, medios de comunicación,… Los medios tecnológicos son una herramienta más que tenemos. En la Edad Media no los tenía, pero si hubieran dispuesto de ellos, los habrían usado, porque nos tenemos que dar a conocer. Mi única obsesión, desde que fui elegido, es normalizar las relaciones de la Masonería con la sociedad española. Debemos salir al exterior, que hagamos una labor de difusión y mostremos que somos unas personas absolutamente normales, perfectamente estructurados en la sociedad española y que somos personas casados, divorciados, solteros,… queremos integrarnos, porque nos sentimos integrados. Nunca conseguiremos que la sociedad se acerque a nosotros, si nosotros no nos acercamos primero a ellos.
¿Qué le va a aportar a Salamanca esta Logia?
Es recuperar una Logia que estuvo en activo hasta la Guerra Civil. Tener un centro donde divulgar la Masonería y que los hermanos masones puedan practicarla y no tengan que viajar a Valladolid o Palencia. Además, una población como la de Salamanca, que es importante en todos los sentidos, con una Universidad, donde hay personas intelectualmente bien dotadas, que haya una Logia Masónica creo que es importante. Por otra parte, aquí hay una presencia importantísima de masones iberoamericanos que hacen el post graduado en la Universidad de Salamanca. Decenas de masones pasan todos los años por Salamanca. Tener una Logia donde ellos puedan seguir practicando la Masonería y seguir experimentando esta fraternidad con los hermanos españoles y nosotros con ellos, es fantástico.
No pueden hablar de política, de religión,… teniendo en cuenta que dejan la negatividad a la puerta. ¿Qué corrompe a los masones?
La vanidad por dentro. Aquí no hay dinero, aunque tenemos unos presupuestos de 1.800.000€ como asociación donde hay 2.500 masones. Pagamos una cuota, que son los ingresos que recibimos.
¿Quiénes son sus enemigos?
Los enemigos de los masones siempre están dentro. Desgraciadamente, la Masonería en España siempre ha estado desunida y peleada entre ellos. Esto es terrible. Ahora, vivimos el momento más dulce. Desde 2010, cuando me nombraron Gran Maestro de la Logia de España, se vive una situación de armonía, siempre hay personas descontentas, pero eso es lógico.
¿Cuántas Logias hay en España?
La Helmántica será la 182.
¿Son libres de irse?
Sí, te puedes ir cuando quieras. Envías un correo electrónico o una carta o levantándote en una tenida y diciendo: ‘Quiero que conste en acta que me voy’. No se le pide explicaciones, ni nada. Esto es lo que nos diferencia de una secta: Es difícil entrar y muy fácil salir.
