El juzgado delo Contencioso Administrativo número 1 de Salamanca ha anulado la venta de cinco parcelas de suelo urbano en la urbanización Átika.
Las parcelas no se llegaron a vender por falta de ofertas, pero la ley de urbanismo permitía luego al Ayuntamiento venderlas un año después a un precio más barato a quien pudiera interesarle.
El concurso inicial de 2012 fijó el precio en 817.769 euros y nadie pujó, pero ese precio podría rebajarse posteriormente, pero la operación se paralizó por el recurso de IU-Los Verdes.
La ley obliga a un Ayuntamiento a destinar el dinero que ingrese por la venta de suelo a algún fin social o a construir viviendas protegidas, pero en el pliego de condiciones el Consistorio santamartino no especificaba para qué, según dijo Gorka Esparza, abogado de IU-Los Verdes, que son quienes llevaron el caso al juzgado, y es el décimo que le ganan en materia de urbanismo al anterior alcalde, Javier Cascante.
El Ayuntamiento dice que la sentencia habla de un proceso de venta que quedó desierto y no llegó a materializarse, «con lo cual no se produjo licitación y no hubo daño patrimonial«.




















