El pantano de Santa Teresa está casi lleno, lo que ha obligado a la Confederación Hidrográfica del Duero a abrir las compuertas desde hace algunas fechas para hacer sitio al agua que aún está llegando al embalse.
Las últimas borrascas han contribuido a recuperar las reservas de agua del pantano de Santa Teresa, que en lo que llevamos de marzo ha duplicado el agua que tenía a finales de febrero.