Salamanca cerró 2015 con un total de 30.091 desempleados registrados en las oficinas del Ecyl, lo que supone 2.896 menos que hace un año.
Según los datos facilitados este martes por el Ministerio de Empleo, ese descenso del desempleo se produjo a pesar de que las afiliaciones solo aumentaron en 1.985 personas (hay 112.323 afiliados), lo que hace pensar que los 900 restantes se han borrado del Ecyl porque han acabado sus prestaciones, o porque no lo ven capaz de ayudarles a encontrar empleo o porque han abandonado la provincia.
Sólo en noviembre el paro bajó en 465 personas cuando las afiliaciones disminuyeron en 147, lo cual alimenta esas sospechas en CCOO de Salamanca, quien considera que “si las personas desempleadas descienden y lo mismo ocurre con las cotizaciones, es evidente que lo que está pasando en nuestra provincia es que los usuarios de los Servicios Públicos de Empleo desaparecen de los registros por que dejan de formar parte del sistema y no por que hayan encontrado un puesto de trabajo”.
Además del desánimo creciente entre los desempleados, que les lleva a borrarse o a irse fuera de Salamanca, la mayor parte del empleo que se crea es temporal (el 92% de los contratos firmado en 2015), y buena parte es, además, a tiempo parcial.
“En definitiva está claro que en nuestra provincia el año 2015 no ha sido el del cambio del ciclo económico ni el año de la salida de la crisis y que en nuestra ciudad no se sienten las mejoras económicas de las que alardea el Gobierno ni se vislumbra un cambio significativo en nuestro contexto laboral”, indica CCOO.
