Miles de salmantinos desfilaron este viernes ante la imagen de Jesús Rescatado, como suele ser tradicional el primer viernes de marzos, para participar en el Besapiés a la imagen de Nuestro Padre Jesús Rescatado, en la parroquia de San Pablo.
La jornada comenzó a las 00.00 horas con una eucaristía que concluyó con la exposición de la imagen para el Besapiés.
La iglesia abrió sus puertas de nuevo a las 7 de la mañana y hasta las 12.00 de la noche. Hubo diez misas entre las 8 y las 20 horas, y el rezo del Vía Crucis.
Durante todo el día hubo confesores «para acercarse al sacramento de la reconciliación en este tiempo de Cuaresma».
Este Cristo llegó a Salamanca procedente del reino de Fez, de donde los Trinitarios lo rescataron en 1681 junto a otras imágenes y diversos cautivos religiosos. Es la interpretación de un Ecce-Homo, con túnica de terciopelo morada y bordada en oro, cíngulo al cuello y la cintura, y escapulario trinitario. El ajuar de la imagen se compone de tres túnicas, cordones y dos coronas.