El Colegio de Enfermería de Salamanca secundó este viernes la petición realizada el 6 de julio por el Consejo de Colegios de Enfermería de Castilla y León al sindicato médico CESM en la Comunidad en la que se solicita la rectificación de forma inmediata sus «graves acusaciones» de intrusismo profesional en la «gestión enfermera de la demanda».
Asegura que se trata de un proyecto piloto en la Comunidad que permite a la enfermería valorar a dónde debe ir un paciente sin cita previa, según explicó esta semana el consejero de Sanidad, Antonio Sáez, quien rechazó que hubiera, como denunció el CESM, invasión de competencias.
El presidente del Consejo de Colegios Profesionales de Enfermería, Alfredo Escaja, ha aclarado a través de un comunicado que «al igual que ya lo ha hecho el consejero de Sanidad», que «en ningún momento las enfermeras están realizando funciones para las que no están capacitadas».
Escaja ha incidido en que las competencias enfermeras vienen marcadas por la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias por las que corresponde a los Enfermeros la dirección, evaluación y prestación de los cuidados de Enfermería orientados a la promoción, mantenimiento y recuperación de la salud, así como a la prevención de enfermedades y discapacidades.
La figura de la «gestión enfermera de la demanda» puesta en marcha, supone, a su juicio, «un claro avance en el desarrollo profesional de la Enfermería, realizando las competencias para las que están capacitadas por su propia titulación y a su vez repercute mejorando la calidad asistencial que reciben los usuarios de la Atención Primaria».
Para el colegio profesional, la «gestión enfermera de la demanda supone un claro beneficio no solo para enfermeras y pacientes, sino también para los médicos, por lo que el Consejo de Enfermería no va a consentir que se trate de confundir a la población y que un sector minoritario de este colectivo trate de amenazar con denuncias».
