Las plataformas en Defensa de la Sanidad Pública de Castilla y León convocan una manifestación para su defensa este sábado 20 en la plaza Mayor de Valladolid, a las 12:00 horas
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) pide el apoyo y la participación de la ciudadanía a la manifestación en defensa de la sanidad pública de Castilla y León que, bajo el lema ‘Nos duele la Sanidad’, se celebra este sábado 20 en Valladolid, convocada por las plataformas sanitarias que se han ido creando en la Comunidad. “En la actualidad estamos viviendo una situación de recortes, provocada por la crisis, que está suponiendo el deterioro progresivo de la sanidad pública de toda España en general, y muy particularmente en Castilla y León, afectando de forma significativa tanto a los usuarios como a los profesionales sanitarios y no sanitarios”, advierte CSIF.
“Solo con un apoyo mayoritario de los ciudadanos conseguiremos acabar con esta política de recortes seguida por la Consejería de Sanidad, recuperar la sanidad pública de calidad y la atención al usuario que teníamos antes de la crisis, acabando con el deterioro progresivo de este servicio básico que estamos sufriendo”, añade CSIF.
Como consecuencia de este deterioro se crearon Plataformas en Defensa de la Sanidad Pública en distintas provincias de Castilla y León, que coordinadas entre sí han convocado esta masiva manifestación en Valladolid de mañana sábado 20 de enero, explica el sindicato independiente CSIF, que recalca que “esta manifestación necesita el seguimiento mayoritario de todos los afectados e implicados, para luchar por una sanidad pública de calidad, y exigir a la Junta de Castilla y León, y más concretamente a la Consejería de Sanidad, que se ponga fin a una política de recortes que está afectando a los profesionales sanitarios por los recortes de plantilla, la falta de sustituciones, la amortización de plazas, el aumento de la jornada laboral, o la modificación de calendarios laborales.
CSIF también denuncia la privatización encubierta de algunos servicios como las Unidades de Gestión Clínica (UGC), la derivación de procesos quirúrgicos a clínicas privadas, o el cierre sistemático de camas en los hospitales. Asimismo, lamenta el aumento de la presión asistencial de los profesionales sanitarios. “Aspectos, todos, que repercuten en el servicio a los usuarios por el aumento de las listas de espera, tanto quirúrgicas como de consultas y pruebas diagnósticas, consecuencia de la reducción de recursos humanos en nuestros centros públicos”, señala.