La muestra recoge documentos inéditos de su detención en la frontera con Portugal cuando trataba de partir hacia el exilio, así como cartas de Vicente Aleixandre o del propio poeta alicantino
C.T.M./ ICAL. El Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca acoge desde este miércoles y hasta el próximo 27 de mayo la exposición Miguel Hernández en la cárcel de Alicante: un intento de silenciar la palabra, con la que pretende homenajear a las víctimas de las cárceles franquistas durante y tras la Guerra Civil a través de los documentos e imágenes que atestiguan el paso del poeta alicantino por el penal de la capital de su provincia natal.
La exposición incluye documentos procesales y policiales inéditos, como los que acreditan la detención del poeta Miguel Hernández por la Guardia Nacional Republicana portuguesa en Moura, en la frontera entre España y el país luso, cuando el poeta trataba de exiliarse en América vía Portugal.
También se encuentran recogidos los consejos de guerra a los que fue sometido por el Ministerio de Defensa, su ficha del Quinto Regimiento de las Milicias Populares o la que le incluye en el Registro de la Población Reclusa, procedentes del Archivo General de la Administración de la localidad madrileña de Alcalá de Henares.
Así, la muestra logra «un hito histórico» al acumular todos los expedientes penitenciarios, procesales y policiales de Miguel Hernández que «acreditan la represión que sufrió» el poeta, tal y como explicó durante la presentación de la exposición la directora del Archivo Histórico Provincial de Alicante, María del Olmo.
De igual manera, el Centro incluye en la exposición documentos de los compañeros de prisión de Miguel Hernández en el Reformatorio de Adultos de Alicante, con expedientes de intelectuales alicantinos que convivieron con él en la cárcel como los que acreditan el paso por el penal de Ricardo Fuente y Carmen Caamaño, cuyo hijo donó a la muestra toda la documentación del paso de sus padres por la cárcel, así como los dibujos que los presos hicieron para él tras su nacimiento en 1939.
El Miguel Hernández más íntimo
«Es la parte más cálida y tierna de la exposición, porque ha contado con la cesión de la documentación de familias de los presos«, explicó María Del Olmo, quien también hizo mención a los documentos que acreditan la intervención de la Embajada de Chile en el cuidado y atención de los familiares de Miguel Hernández cuando estaba encarcelado, así como cartas de Vicente Aleixandre y Josefina Manresa y documentos del Centro Pablo de la Torriente de Cuba.
«Este homenaje está en el sitio ideal porque Miguel Hernández es una figura que representa la represión y la memoria histórica como nadie», aseguró María del Olmo, quien estuvo acompañada en la presentación de la exposición en el CDMH por el subdirector general de Archivos Estatales, Severiano Hernández, que señaló que «es un homenaje a Miguel Hernández en nombre de todos los hombres y mujeres que estuvieron en el difícil trance de la posguerra».
