[dropcap]E[/dropcap]l padre Ángel, fundador y presidente de la organización humanitaria Mensajeros de la Paz, lanzó este miércoles una misiva de optimismo y aseguró que “es mentira que haya una crisis de valores”, ya que, en su opinión, “nunca en la historia de la humanidad hubo tanta solidaridad como ahora”. “Es verdad que hay pocos curas y monjas, pero hay muchos cooperantes, voluntarios y personas que quieren hacer el bien a los demás. Creo que tenemos que estar felices y orgullosos de esta sociedad en la que nos toca vivir”, reflexionó.
ICAL. Así lo apuntó en el salón de actos de Unicaja Banco de Palencia, donde acudió invitado por la entidad financiera para impartir una conferencia de solidaridad, que también ofrecerá el próximo lunes 3 de diciembre en Zamora, según informó la directora territorial de Unicaja Banco en León, Galicia y Asturias, Margarita Serna.
El religioso se mostró “feliz de estar aquí”, y aseguró que llegaba “más que a contagiar a contagiarse uno de la solidaridad que existe en Castilla y León, donde llevamos muchos años trabajando con hogares y residencias”.
Instantes antes de comenzar su alocución, el padre Ángel señaló que pretendía transmitir “un mensaje de esperanza y de alegría”, puesto que “hay demasiados políticos, gobernantes y personas en la sociedad que son muy tristes, y necesitamos gente que sea alegre y que nos contagie algo que merezca la pena vivir”.
En su opinión, “estamos mucho mejor que hace 500 años, que hace cien años, que hace diez años o que hace ocho días. Nunca la sociedad fue tan solidaria, nunca nos han dolido en el alma así cosas que suceden lejos de nosotros como son los emigrantes o cerca como esa mujer que se arrojó desde su ventana cuando la iban a desahuciar. La solidaridad en la que todos nos rebelamos contra estos actos no existía antes. Por eso defiendo que el mundo de ahora es mucho mejor. Y sobre quienes se preocupan por el mundo que van a dejarle a sus hijos, les diría que de lo que hay que preocuparse es de que los hijos que dejan al mundo que va a venir sean buenos”, apuntó.
“Nuestros hijos van a vivir mejor que nosotros, y van a ser más generosos y más solidarios que nosotros, pero hay muchos aguafiestas por ahí que hablan de una crisis de valores que es mentira. Nunca se valoró tanto a los valores como ahora; nunca a los corruptos, a los mentirosos, a los tramposos y a los que nos hacen daño nunca les hemos dado tanta leña como ahora, cuando exigimos que deben desaparecer de la sociedad”, remachó.
Un mensajero de Paz
Ángel García Rodríguez, más conocido como Padre Ángel, fundó Mensajeros de la Paz en el año 1962, como una organización no gubernamental dedicada a la creación de hogares para acoger niños y jóvenes privados de un ambiente familiar, o en situación de abandono.
Con el paso de los años amplió sus actividades a otros sectores sociales desprotegidos: las mujeres víctimas de violencia doméstica, los discapacitados físicos o psíquicos, y las personas mayores que viven en soledad, abandono o indigencia. Cuenta con casi 3.900 trabajadores en plantilla y con más de 4.000 voluntarios. Unos 51.000 niños y jóvenes han pasado por sus numerosos centros y casi 12.000 personas mayores han sido atendidas en sus residencias.
Mensajeros de la Paz desarrolla su actividad en 50 países y ha sido galardonada, entre otros, con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.