Las familias que utilizan el servicio de comedor del colegio público de Toral de los Vados (León) han denunciado ante la Junta la aparición de larvas de gusanos en unas patatas a la riojana que se sirvieron el pasado 17 de diciembre.
Unas niñas se quejaron de que había larvas en el caldo de las patatas y lo pusieron en conocimiento de las cuidadoras.
Luego se retiró el plato de la mesa de los mayores, pero no se hizo lo mismo con lo más pequeños.
La empresa concesionaria del servicio afirma que estableció el protocolo previsto en estos casos, consistente en solicitar un informe externo a un veterinario.
Otra empresa realizó el examen y determinó que la muestra testigo no tenía más que «vegetales que podrían ser un condimento», si bien el informe asegura que el análisis se hizo «de manera visual», algo que a las familias no les sirve pero sí a la Delegación territorial de la Junta, que se acoge al procedimiento y da por cerrada la polémica.