El abandono escolar temprano se reduce

Hasta el 13,9 por ciento a finales de 2018
instituto martinez uribarri
Un instituto salmantino. (Archivo)

La tasa de abandono escolar temprano en Castilla y León se redujo hasta el 13,9 por ciento al finalizar 2018, lo que supone cuatro puntos porcentuales menos que la media del conjunto del país, que fue del 17,9 por ciento. Con este dato, la Comunidad mejora la tasa de abandono escolar en 2,8 puntos porcentuales respecto al año anterior, mientras que en el conjunto de España el descenso fue de cuatro décimas.

 

Por comunidades autónomas, País Vasco (6,9 por ciento), Cantabria (9,8 por ciento) y Navarra (11,4 por ciento), son las que registran las tasas de abandono escolar más bajas de España, mientras que Melilla (29,5 por ciento), Baleares (24,4 por ciento) y Murcia (24,1 por ciento) contabilizan el mayor grado de abandono. Así se desprende del análisis elaborado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional de las variables educativas de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística publicadas este martes.

Por sexos, la tasa de abandono en el caso de los hombres se situó en el 18,1 por ciento, frente al 21,8 por ciento registrado el año pasado, una tasa más baja que la nacional, que a finales de 2018 se situó en el 21,7 por ciento (una décima menos que un año antes). En lo que a las mujeres se refiere, la tasa de abandono cayó hasta el 9,6 por ciento frente al 11,4 por ciento registrado a finales de 2017. También en este caso el dato es inferior a la media nacional, que a finales de 2018 fue del 14 por ciento, cinco décimas menos que el año anterior.

En el caso de la población de entre 25 y 64 años que participa en educación o formación, la tasa de abandono ascendió hasta el 10,4 por ciento frente al 9,8 por ciento de un año antes. Este dato creció una décima en el caso de los hombres, hasta llegar a una tasa de abandono del 8,5 por ciento, y también aumentó en el caso de las mujeres, en un 1,1 puntos porcentuales hasta llegar al 12,3 por ciento, una tendencia igual que la que tuvo lugar a nivel nacional.

De esta forma, la población de entre 30 y 34 años que cuenta con un nivel de Educación Superior en Castilla y León crece hasta el 42,1 por ciento (1,2 puntos porcentuales más que en 2017), con un aumento de 1,3 puntos en el caso de los hombres (del 34,8 al 36,1 por ciento), y de 1,1 puntos más en el caso de las mujeres (del 47,5 al 48,6 por ciento).

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