Los responsables de 27 centros de investigación de toda España, entre los que se encuentra el Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca, y su vicerrector Xosé Bustelo, exigieron al Gobierno la toma de medidas urgentes para «solucionar la parálisis que afecta a los grupos de investigación».
ICAL. Así se lo hicieron llegar a través de una carta publicada en el diario ‘El País’. Los firmantes denunciaron de este modo el retraso de «siete meses» en la concesión de dos grandes programas de investigación estatal de los que dependen 6.600 grupos de investigación.
Según el comunicado publicado, pese a que los proyectos deberían haberse iniciado el 1 de enero de este año, aseguran que «no lo harán hasta los últimos meses de este año según los cálculos más optimistas». En ese sentido, los firmantes destacaron que se trata de un problema «desde hace años». Según fuentes del Ministerio de Economía, el programa estatal de I+D+i orientado a los retos de la sociedad y el de fomento de la investigación científica y técnica de excelencia suponen una financiación de 350 millones de euros.
«El periodo prolongado de reducción y congelación de fondos públicos llega a un punto de casi no retorno». En ese sentido, expusieron que «de no solucionarse a corto plazo, amenaza con colapsar completamente el sistema científico español».
Dicha carta está encabezada por el presidente y vicepresidenta de la alianza de centros Somma, Luis Serrano y María Blasco, el presidente de la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer de Salamanca, Xosé Bustelo, además de cuatro sociedades científicas y 40 representantes de la investigación como Miguel Beato, del Centro de Regulación Genómica; el director del Programa de Ciencias del Cáncer del Instituto de Investigación Biomédica, Eduard Batlle; el jefe de oncología médica del Hospital 12 de Octubre de Madrid, Luis Paz-Ares; o la investigadora del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, Marisol Soengas, entre otros.
A su juicio, «la ciencia española es una zona catastrófica», por lo que reclamaron «medidas urgentes para rescatarla», explicó desde el centro salmantino, Bustelo. El retraso de las convocatorias reducirá la financiación de grupos de investigación entre un 25 y un 50 por ciento. De este modo, los más afectados son «los grupos más pequeños y los liderados por científicos más jóvenes», alertaron. Estos dos programas afectados aportan financiación durante tres años, con lo que ahora mismo están afectados un tercio de todos los grupos del país, según los promotores del escrito.
Los responsables pidieron en su carta al Gobierno de Sánchez «medidas a corto plazo» para agilizar la entrega de la financiación este año y el próximo, ya que según comunicaron, «es previsible que la convocatoria a cargo de los presupuestos de 2019 sufra los mismos retrasos».
Asimismo, expusieron que este mes el Parlamento aprobó un paquete de medidas para la ciencia impulsado por el ministro de Ciencia, Pedro Duque. Pero según los promotores, estas medidas «son insuficientes». Desde el Gobierno señalaron que parte del problema se debe al retraso acumulado en la aprobación de los presupuestos de años anteriores y al rechazo de las cuentas de 2019 en el Parlamento.
El rechazo de los presupuestos 2019, que incluían una partida para recursos propios de la Agencia Estatal de Investigación, «nos dificulta poder organizar más racionalmente los calendarios de las convocatorias», así como asignar debidamente los recursos que se requieren para la investigación, comentaron también a través de las redes sociales.
Además, los científicos pidieron al próximo Gobierno que las convocatorias de proyectos de investigación «se publiquen siempre el mismo día del año», algo que a su juicio, daría previsibilidad al sistema de I+D y evitaría los retrasos.
Insistieron en pedir que «la Agencia tenga un presupuesto plurianual que la blinde de los problemas presupuestarios actuales», como explicó Luis Serrano. «La otra necesidad que afrontamos es que se aumente la financiación para la I+D+i al menos un tres por ciento», por encima de la inflación durante una década. Esta medida cambiaría la situación de una forma radical. De cara a la campaña, apelan a la necesidad de un debate sobre qué papel le dan a la ciencia y la innovación los diferentes partidos. «Necesitamos saber qué compromisos están dispuestos a hacer», concluyeron.