La DGT tiene desplegados 37 radares en las carreteras de Salamanca, 23 de ellos en carreteras secundarias y solo 14 en autovías y nacionales.
De todos los radares que controlan la velocidad en las carreteras de la provincia, 30 son móviles, es decir, que los agentes de Tráfico de la Guardia Civil instalan en esos puntos el coche o un radar con trípode, y los ocho restantes son fijos.
De los siete fijos seis están en las vías principales (autovías y nacionales), entre ellos uno de los que más recauda de España (el que hay junto a la rotonda de Buenos Aires en la A-66) y solo uno en secundarias, la SA-20, en el polígono El Montalvo, justo junto a la incorporación desde la rotonda de la carretera de Béjar.
Los móviles se localizan, fundamentalmente, en las vías secundarias. Solo ocho están en vías principales. Concretamente, cuatro en la N-630 y otros cuatro en la N-620. No hay ninguno en autovías.
Las carreteras más vigiladas por radares son la N-630 (cinco radares en su trazado por Salamanca), y la N-620 (con cuatro) y la carretera de Vitigudino, con tres.