«Se dijo que el Paseo de Canalejas sería un boulevard y no. Es solo una vía pensada para os coches privados».
Así resume Gabriel Risco, concejal de Ganemos y cabeza de lista para las próximas elecciones municipales, el resultado de la ‘reforma’ del Paseo de Canalejas.
Han sido nueve meses de obras y 1,2 millones de euros para, al final, eliminar la mediana con arbusto para ensanchar un poco, las aceras, muy poco en las zonas donde se han incrustado pequeñas zonas verdes.
Se han eliminado algunas plazas de aparcamiento, que dificultaban el tráfico con sus maniobras, pero el resultado deja una calle muy similar a la que había, 1,2 millones e euros después.
«Ha quedado prácticamente igual. Se ha perdido una oportunidad histórica porque esto durará años», ya que el equipo de Gobierno que entre tras el 26 de mayo o en adelante, tendrá difícil justificar otra gran inversión en esa vía para hacerla más amable para el peatón.
«No podemos cambiar la ciudad de la noche a la mañana, pero sí en los proyectos que van saliendo y en los barrios», comente el edil de Ganemos, a modo de estrategia si tuviera influencia en el equipo de Gobierno de la ciudad.
«Solo se ha hecho un remozado que ha salido demasiado caro. Se pudo invertir mucho mejor el dinero en esa zona», señala José Luis Mateos, portavoz del grupo socialista y cabeza de lista para las municipales por el PSOE.
Podemos indicó que uno de los elementos más problemáticos del proyecto del Ayuntamiento es que “no aborda ni soluciona el principal problema de Canalejas, el intenso tráfico rodado que soporta, que no se arregla con esta obra; algo que podría haberse logrado, por ejemplo, instalando un carril-bus, que mejoraría la movilidad de la vía sin aumentar la intensidad del tráfico, la haría más segura para los peatones y permitiría el traslado de alguna de las paradas de Gran Vía a Canalejas, como ha instado el Procurador del Común”.
Respecto a las zonas verdes, los jardines son muy pequeños, los alcorques usarán plástico verde que imita el césped y a una profundidad de 80 cm, “insuficientes para disfrutar de árboles de cierto porte. Y todo ello por un millón y medio de euros, un coste desmedido en una zona en la que recientemente ya se había intervenido.