- El PSOE acusa a los ediles de Cs de pactar con el PP a cambio de un sueldo en el Ayuntamiento porque no tienen otro modo de vida
- Aseguran que la dimisión de la número 2 de Cs al Consistorio, la única de los cuatro que no depende económicamente e la política, pone en evidencia a los que quedan
La dimisión de la número dos de Ciudadanos al Ayuntamiento confirma, según el PSOE, que su «pacto de la vergüenza con el PP se resume en un reparto de cargos y sueldos».
La dimisión de María Mayoral, concejal electa por Ciudadanos como número dos en las listas de este partido antes incluso de tomar posesión, confirma, según los socialistas, que el pacto entre esta formación «no tiene credibilidad, no obedece a la búsqueda de la estabilidad institucional en el Ayuntamiento de Salamanca, ni a la mejora y el cambio en las políticas en beneficio de los salmantinos, sino al puro mercadeo en el que solo importa el reparto de cargos, prebendas, sillones y poltronas, acompañado por los respectivos sueldos«.
La marcha de Mayoral, motivada por el ninguneo y la marginación de la que ha sido víctima por sus propios compañeros de partido tras mostrar su oposición al “pacto de la vergüenza” con el PP, «es un acto de dignidad por su parte que deja al descubierto y desenmascara al resto de concejales electos de Ciudadanos, cuyo único interés ha sido el de asegurarse buenos sueldos y defender sus propios intereses por encima de los de Salamanca y de propiciar estabilidad política al Consistorio salmantino, políticas de cambio y de progreso, a favor de la limpieza y la transparencia en la política y la lucha contra la corrupción, el amiguismo y el clientelismo».
A los socialistas les llama la atención que haya sido María Mayoral, «la única concejal de los cuatro electos de Ciudadanos que por su actividad profesional no depende económicamente de la política«, la que se haya opuesto al “pacto de la vergüenza” con el PP, que haya sido ninguneada y apartada de todo poder de opinión y decisión por este motivo. «Un hecho que confirma que en ese pacto de la vergüenza solo ha primado el interés económico personal del resto de concejales electos», señalan.
La incomodidad que provocaba el “pacto de la vergüenza” entre PP y Ciudadanos en Salamanca y en Castilla y León entre las filas de Cs, «era un secreto a voces y que ahora ha quedado confirmado con la dimisión conocida hoy. Los silencios cómplices de los representantes de Ciudadanos en Salamanca en torno al caso de presunta financiación ilegal de las primarias del PP en Castilla y León, donde fue elegido Alfonso Fernández Mañueco, al borde de la imputación por este asunto, han soliviantado a las bases del partido, que en ningún momento han sido consultadas sobre los pactos postelectorales, viendo que los compromisos, las promesas y lo manifestado en campaña por la formación de Ciudadanos y su candidatos se ha quedado todo en humo, papel mojado, donde dije digo ahora decir Diego en un claro y manifiesto engaño tanto a sus votantes como a la totalidad de los ciudadanos de Salamanca y de Castilla y León», indican los socialistas.
La situación personal de los concejales electos de Ciudadanos en Salamanca, «que basan su supervivencia económica en la dedicación a la política, parece ser el motivo principal del pacto con el PP, visto los últimos acontecimientos. La promesa de sueldos y más asesores para Ciudadanos, ha sido determinante para que este partido haya sucumbido a la dinámica de la venta de su apoyo al PP a cambio de sillones bien remunerados en el Consistorio salmantino, o lo que es lo mismo, vender Salamanca y a los salmantinos por un plato de lentejas».
Los tres ediles que quedan pedirán una dedicación exclusiva y a Mayoral le había dicho que se quedara en Madrid, porque tiene trabajo, y solo apareciera por aquí puntualmente para alguna comisión y plenos. De los sueldos ya se aprovecharían los tres que quedaban aquí.
El hecho de que Ciudadanos haya vetado al PSOE en las conversaciones para hablar sobre el futuro del Gobierno municipal de la ciudad «confirma, además, que no han querido dar a conocer este tipo de prebendas antes de la sesión de investidura del próximo sábado. Confirma que nunca han estado interesados en propiciar políticas progresistas en la ciudad, políticas de cambio, lucha contra la corrupción, el amiguismo y el clientelismo. El oscurantismo del pacto de la vergüenza con el PP, sin luz y sin taquígrafos, a espaldas y a escondidas de todos, incluso de sus propios cargos electos y de sus bases, además de constituir una actitud antidemocrática, coloca a Ciudadanos y sus concejales electos en una posición de escudo de los representantes de la corrupción. Contradiciendo sus mensajes en campaña colocándoles en la más absoluta de las irrelevancias políticas», señala el PSOE salmantino.
Ante los últimos acontecimientos, los socialistas hacen públicas varias preguntas e interpelan a los concejales electos de Ciudadanos que quedan, con Ana Suarez y Fernando Castaño a la cabeza, sobre lo que se siente tras confirmarse «la traición a sus votantes y a sus propios compañeros apenas quince días después de las elecciones. Y si consideran justo el precio de saldo recibido por esta traición y por vender su dignidad», concluyen.