Una intervención de los bomberos de Salamanca ha descubierto las penosas condiciones en las que vivía un septuagenario, solo y rodeado de suciedad en su piso alquilado del Camino de las Aguas.
Fue el casero que le tiene alquilado el piso del número 16 del Camino de las Aguas, quien avisó a los bomberos porque llevaba un mes sin saber nada de su inquilino, mayor de setenta años, y se temía que hubiera pasado algo.
Pasaban las seis de la tarde cuando una dotación del servicio municipal de bomberos llegó al lugar y al abrir la puerta descubrieron su situación.
El hombre estaba aparentemente en buenas condiciones, pero solo y rodeado de basura y suciedad.
Unas condiciones de vida “inadecuadas” que motivarán que el servicio de extinción de incendios de Salamanca dé traslado del parte a los Servicios Sociales para que puedan ayudar a este hombre.
Además de los bomberos, se desplazaron al lugar dos dotaciones de la Policía Nacional, u de la Policía Local y una ambulancia de Sacyl.
