El presidente de Andalucía, Juanma Moreno, del PP que gobierna con el apoyo de Cs y Vox, ha justificado el nuevo modo de hacer las cosas en el ejecutivo andaluz, frente al enchufismo del que hizo gala el PSOE.
Su forma de acabar con esas prácticas es que, por ejemplo, su hermana, que quedó segunda con bastante menos puntos que el primero de los cuatro aspirantes a ocupar la dirección de un conservatorio público en Málaga, acabó llevándose la plaza.
Una sustitución de un año, de momento, que veremos si no se convierte en definitiva, porque con el nuevo gobierno andaluz no hay enchufes. Las cosas ahora se hacen «por criterios de capacidad, de libre concurrencia”, dijo el presidente este sábado en Málaga.
Si luego llega la hermana del presidente de la Junta, por ejemplo, y saca menos puntos que otra candidata, llega la “inspección de Educación” y le otorga a ella el puesto. Claro, la Inspección de Educación, como si fuera un órgano aséptico y no un órgano dependiente de la Junta que es quien le mira la patita a los responsables de esos servicios para evitar que los socialistas sigan enchufando.
Ahora ya no hay enchufes, sino un procedimiento «absolutamente limpio y normal» como procede en un gobierno que «hemos venido a construir un nuevo porvenir a los andaluces y nunca ningún nombre ni ningún apellido va a condicionar ninguna selección de personal. Eso se ha acabado, eso era parte de tiempos anteriores», dijo.
Si la que se lleva una plaza pública de postín aunque haya otra candidata con más puntos, y la que se la lleva los mismos apellidos que el presidente de la Junta no significa nada sospechoso, porque llega la Inspección de Educación que depende del presidente y es quien dice que es la más apropiada para el puesto, como suele ocurrir siempre con los que quedan segundos.
Eso sí, Moreno ha criticado la “cacería” que se quiere hacer con su hermana, la pobre, que quedó segunda y la Inspección de Educación dijo que era más idónea que la que quedó primera, porque como en su día renunció al puesto, ahora ya no le cuentan ni la capacidad ni méritos que le adornen. Donde esté una hermana del presidente, que se quite la competencia, que, por supuesto, cuenta con “el máximo respeto” del jefe del ejecutivo andaluz.
