El 12 de diciembre se celebrará un año más la Nochevieja Universitaria con dos convocatorias, la que organizan los hosteleros junto al Ayuntamiento en la Plaza Mayor y luego en 30 bares de la ciudad, y la que convoca de forma paralela el Grupo Kandhavia en sus once locales nocturnos.
La fiesta de los hosteleros y el Ayuntamiento se llama ahora ‘Fin de Año Universitario’, y es la que vende en exclusiva los packs con las gominolas y los gorros horteras de una marca de bebidas alcohólicas.
Es la que monta el circo en la Plaza como reclamo para los miles de jóvenes que acuden esa noche y a partir de las campanadas, llenar los bares de copas.
Hosteleros y Ayuntamiento tienen concertados 30 locales para sacarse un bono-copas más asequible.
En paralelo se organiza un año más el Cotillón Universitario, que sigue utilizando la marca ‘Nochevieja Universitaria’, y que corre a cargo del grupo Kandhavia, propiedad de los dueños de los hoteles Alameda Palace (donde el PP organiza sus saraos electorales) y el Corona Sol (el de las licencias anuladas y que sigue operando con la impunidad que le concede el Ayuntamiento).
Sus once salas, las más históricas de la noche salmantina, ofrecen un pack a precios irrisorios para llenar sus espacios aprovechando la afluencia de jóvenes que no saben (y probablemente ni les interesa) si se meten en locales oficiales o no de la fiesta.
Cada entrada es un ticket válido como consumición en cualquiera de los 11 locales y discotecas más famosas de la ciudad. Cada una cuesta 2,5 euros comprándolas antes del 3 de diciembre y tres euros hasta el día 12.
La copas corrientes en los bares nocturnos de Salamanca oscilan entre los cinco y los siete euros, pero el día 12 se puede consumir gran cantidad de alcohol a precios de caña y tapa.
El presidente de los hosteleros salmantinos, Álvaro Juanes, dijo este miércoles que es «normal que surja alguna ofertilla más» aparte de la ‘oficial’, en referencia al Cotillón Universitario. «Vemos con naturalidad que haya alguna iniciativa más. El año que viene hablaremos», dijo.
