El Corredor Atlántico gana en León la primera de la batalla en la guerra que mantiene con el Mediterráneo para convertirse en el principal eje de paso del tráfico de mercancías en España hacia Europa. Prueba de ello son los 33 servicios de este tipo que atraviesan a diario Pajares, frente a los 12 de viajeros, mientras entre Castellón y Tarragona se contabilizan 55 comerciales y 12 de carga.
ICAL. Así lo reflejan los datos de las circulaciones por el nudo que comunica Asturias y León del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif). Frente a la pujanza del arco Mediterráneo, que incorpora a mayor población y zonas con más dinamismo económico, el tráfico ferroviario parece, al menos en esta comparación, bascular hacia la vertiente Atlántica.
Precisamente, Adif entiende que la apertura de la Variante de Pajares, que se producirá en «no mucho tiempo», una vez se terminen de resolver los problemas técnicos surgidos en esta obra que ha retado a la ingeniería civil, dará un impulso al tráfico de mercancías entre Castilla y León y los puertos del Principado. La sociedad remarca la «decisión irrenunciable» de abrir los dos túneles gemelos de este paso subterráneo bajo la Cordillera Cantábrica.
De esta forma, los planes del Ministerio de Fomento dotarán a la galería oeste de la Variante de vías de ancho ibérico y el este, con un sistema mixto -dos hilos-, con el objetivo de que las mercancías puedan cruzar la Cordillera Cantábrica por uno de los tubos y realizar el recorrido inverso, por el otro. Los viajeros, sin embargo, solo atravesarán este paso entre el Principado y León por una galería.
Además, el administrador ferroviario también trabaja en la mejora del corredor ferroviario de 420 kilómetros entre León, Monforte de Lemos (Lugo) y Vigo. Para ello, se redactan los proyectos para la renovación de la vía y se proyecta la electrificación de los tramos pendientes, así como los accesos a los puertos marítimos.
Igualmente, Adif espera que en el futuro, una vez esté en servicio el acceso en Alta Velocidad entre Palencia y Cantabria, dedicar la actual vía, que se acaba de renovar, para el tráfico de mercancías. De esta forma, el paso ferroviario de productos entre la meseta y el muelle santanderino podrá crecer al contar con un trazado prácticamente libre de servicios comerciales. Para ello, ya se están reformando algunos apeaderos, para que tengan la longitud y características adecuadas.
También el gestor de infraestructuras ferroviarias subraya el cambio que supondrá para el Eje Atlántico la electrificación del tramo de vía convencional entre Salamanca y Fuentes de Oñoro, así como los trabajos para contar con la ‘Y’ vasca, diseñada para tráfico mixto.