Sebastián Sánchez es un albañil de 53 años, casado y con dos hijos, que suele jugar habitualmente al cupón y al rasca de la Once.
Este martes, hizo un alto en su tarea para comprar tres rascas al vendedor habitual, que se había acercado hasta la obra para atender a sus clientes en el bario malagueño de Frigiliana.
Sebastián ganó diez euros en cada uno de los dos primeros y cuando desveló lo que ocultaba el tercero se arrodillo en el suelo y se echó a temblar, comentó el vendedor, David Martínez, al Diario Sur.
Una vez repuesto de la alegría de ganar algo más de 800.000 euros netos, el afortunado ganador declaró al mismo periódico que no piensa dejar de trabajar, y de hecho allí seguía, en la obra a donde fue a visitarlo la suerte.
