[dropcap]¿[/dropcap]Cómo explicar a los más pequeños la situación que estamos viviendo? ¿Cómo poner en palabras sencillas un momento tan complejo? Esta fue la pregunta que se hizo la periodista segoviana María Coco el pasado viernes, 13 de marzo, cuando se anunció la declaración del estado de alarma.
En casa, junto a sus dos hijos y sus cientos de preguntas, comenzó a escribir una historia para intentar explicar lo que, incluso para los adultos, es incomprensible.
Coronavirus no es el nombre de un príncipe (ni de una princesa) nos mete de lleno en la cabeza de un niño o de una niña de aproximadamente siete años, que cuenta cómo está viviendo estos días en casa y los síntomas que tiene, habla de sus nuevas rutinas, de nuevos hábitos de limpieza e incluso de nuevos retos con premio: lavarse las manos continuamente mientras canta su canción favorita. A través de su imaginación nos cuenta qué siente cuando aplaude por la ventana o cómo se imagina en su castillo, también sin cole, a Coronavirus, ese nuevo ser que ha llegado a nuestra vida y del que tanto hablan los mayores.
«Los cuentos son una ventana, más en una casa cerrada. Cuando mis hijos comenzaron a preguntarme por estos días, nuevos para ellos pero también para nosotros, y tan difíciles, pensé en asomarnos juntos a esa ventana y empecé a escribir», explica la periodista segoviana María Coco, autora del proyecto. Entonces, junto a la ilustradora Sara Ramírez y la coordinadora de publicaciones y correctora de textos, la también periodista salmantina María R. Coco, inició una aventura entre teléfono, videollamadas y WhatsApp. Juntas, durante tres días, y en tiempo récord, trabajaron en esta publicación que se lanza con el propósito de ayudar a las familias en estos momentos tan difíciles.
El libro ya puede consultarse gratuitamente, cuenta con 32 páginas e ilustraciones llenas de sensibilidad. Asimismo, estará colgado en Amazon en unos días, por si alguien quisiera adquirir un ejemplar en versión im-presa. El objetivo no es otro que compartir una historia bonita con todas las familias que, es-tos días, se encuentran confinadas en sus casas.
Si quieren incrustar el libro en sus páginas pueden hacerlo con el siguiente enlace:
El libro pueden leerlo en versión digital (y compartirlo)