Muchas epidemias que han asolado a la humanidad tienen su origen en nuestra relación con el medio ambiente y cómo le hemos ido ganado terreno, rompiendo el equilibrio que hace que se mezclen especies y sus microbios que al pasar al hombre son patógenos. Este podría ser también el origen de la pandemia de coronavirus que nos tiene acogotados.
Lo inevitable en estas circunstancias es buscar el origen por la vía de la conspiración, porque no faltan argumentos para pensar mal. Pero existen otras teorías basadas en argumentos científicos que podrían explicar el origen. Un artículo publicado por Le Monde Diplomatique aporta una versión asentada en fundamentos científicos sobre el origen de esta epidemia y otras que han sacudido ya al planeta y las que están por venir.
Los problemas comenzaron desde el principio, al domesticar a los animales para convertirlos en bestias de carga. A cambio, los animales nos ofrecieron algunos regalos envenenados: les debemos el sarampión y la tuberculosis a las vacas, la tos ferina a los cerdos, la gripe a los patos.
Y mientras tratamos de combatir una pandemia como la actual quizá ya se está gestando la siguiente. ¿Qué podemos hacer? En ese interesante artículo proponen los hábitats salvajes para hacer que los animales conserven sus microbios en vez de transmitírnoslos a nosotros.
Y es que, según el texto, hay que asumir que “las emergencias de virus son inevitables, las epidemias no”.
Puedes leer el artículo en este enlace.
