El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, reclamó este domingo que el decreto ley sobre las medidas urgentes de prevención, contención y coordinación para hacer frente al COVID-19, una vez finalizado el estado de alarma, incluya la limitación de los movimientos de los ciudadanos entre comunidades autónomas, al ser una competencia exclusiva del Gobierno central, y el establecimiento de un cauce “claro y formal” con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
El decreto, que será aprobado el martes en el Consejo de Ministros, debe, a su juicio, recoger, “meridianamente claro”, la limitación de los movimientos de la población entre los diferentes territorios para evitar que ocurra lo que sucedió al inicio de la pandemia. Además, apuntó que la Junta no descarta solicitar el pase a la fase 3 antes de los 15 días previstos, aunque se tendrá que analizar en la Comisión de expertos.
Durante su comparecencia en la Sede de la Presidencia tras la décimotercera conferencia de presidentes, Fernández Mañueco recordó que no todas las comunidades están en las “mismas circunstancias”. Precisó que ya se ha habla de flexibilizar el paso de personas entre las fronteras con Portugal y Francia pero afirmó que la situación es diferente entre Galicia y el país luso que con Castilla y León.
Aseguró que la Junta está en una “buena disposición” para colaborar con el Ministerio de Sanidad, con la presentación de unas aportaciones como identificar “claramente” las competencias de las comunidades, tras la desaparición del estado de alarma. No en vano, consideró que este tipo de cuestiones no está recogida en el borrador del decreto ley, que debe contemplar la nueva normalidad para los españoles.
Reiteró que la postura de la Junta es apostar por la “prudencia” porque la vida y la salud de las personas es un “valor ético” que se tiene en “alta estigma” en el Ejecutivo autonómico. Una defensa que, a su juicio, es compatible con el “máximo” esfuerzo por la recuperación económica, para no dejar a nadie atrás. En todo caso, dejó claro que todo dependerá de la evolución epidemiológica por que ahora queda “todo un mundo” hasta el 22 de junio. También se refirió al trabajo de la Comisión de expertos de la Junta, liderada por el vicepresidente Francisco Igea.
Evolución «positiva»
Alfonso Fernández Mañueco significó que los datos invitan a una evolución “positiva” y una visión “optimista”, aunque reconoció que la situación es mejor en unas provincias que en otras. En este sentido, abogó por la responsabilidad colectiva para contar con la “máxima colaboración” de los alcaldes de los municipios pero también a la responsabilidad individual de las personas. “No podemos bajar la guardia ni los brazos por que puede haber un repunte y un rebrote de los contagios del coronavirus”, expuso. De ahí, que apostara por mantener las universidades de protección como la distancia social, la higiene de manos y la utilización de la mascarilla.
Además, el presidente de la Junta pidió que los acuerdos adoptados en el Consejo Interterritorial de Sanidad se adopten por consenso, y no por mayoría, al ser un ámbito “tan importante”, “delicado” y “sensible”. También trasladó a Pedro Sánchez la necesidad de que haya una mayor coordinación y una unificación de cara al inicio del próximo curso 2020-2021, que se abordará en una Mesa Sectorial el jueves con la ministra e incluso se baraja la convocatoria de una Conferencia de Presidentes monográfico sobre este tema.
