Agentes de la Policía Nacional de Salamanca han detenido a un hombre y a una mujer por cuestiones relacionadas con un teléfono móvil. El primero, por simular que se lo habían robado para cobrar el seguro, cuando se lo había dejado olvidado en un bar donde trabaja una mujer que se lo quedó para regalárselo a su hijo.
El primer detenido fue un hombre como presunto autor de una infracción de simulación de delito por denunciar el robo con violencia e intimidación de su teléfono móvil, así como de una chaqueta, una cartera con 180 euros y las llaves de su domicilio, cuando realmente se dejó olvidado el terminal móvil en un bar de la ciudad.
La investigación se puso en marcha con la denuncia del ahora detenido el pasado 5 de diciembre de 2019, cuando se personó en la Comisaría Nacional de Policía de Salamanca para informar sobre la sustracción violenta de su móvil, así como de una chaqueta, una cartera que contenía 180 euros, y las llaves de su domicilio, por un varón que, según su declaración, le dio un fuerte empujón que le hizo caer al suelo y, tras el presunto robo, emprendió la huida en una ‘scooter’ conducida por otra persona.
En el momento de hacer la denuncia, el hombre presentó un ticket de compra de la chaqueta, así como el justificante de haber retirado la cantidad de 600 euros de su cuenta y documentos del seguro del teléfono móvil que acababa de adquirir y que, presuntamente, fue robado, si bien no presentó informe de la agresión puesto que afirmó no haber sido asistido por el golpe recibido, informó la Policía Nacional de Salamanca.
Los agentes iniciaron entonces las gestiones para localizar al presunto autor del robo, detectando que el teléfono móvil había sido vendido por un joven en una casa de compra-venta de efectos durante los primeros días de junio del año 2020, por lo que fue citado en dependencias policiales.
Sin embargo, en vez del joven se presentó la madre del mismo, señalando que había sido ella quien le había regalado el teléfono móvil a su hijo, que sustrajo al habérsele olvidado a un cliente habitual en el establecimiento que regenta, y del que había borrado varias fotos antes de regalárselo a su hijo.
Como consecuencia de ello, los agentes citaron al denunciante del robo con violencia e intimidación para que explicara la diferencia entre las versiones, ante lo que confesó que había olvidado el teléfono móvil recién adquirido en un bar y que había denunciado los hechos como robo con violencia para poder cobrar la póliza del seguro del móvil.
Ante los hechos señalados, los agentes detuvieron a la mujer como presunta autora de un delito de apropiación indebida y al hombre como presunto autor de un ilícito de simulación de delito. Tras prestar ambos declaración, fueron puestos en libertad, con la obligación de acudir al requerimiento que realice la autoridad judicial.