Tenemos santas, catedráticas, artistas, socialité, empresaria,… Salamanca tiene en su historia grandes nombres de mujer y La Crónica de Salamanca inicia una serie donde se recordará a estas mujeres que dejaron su impronta en la ciudad y fuera de ella.
[dropcap]G[/dropcap]loria Begué nació en León, se formó universitariamente en Madrid y Chicago y desarrolló su carrera de estudiosa de Ley en Salamanca, siendo la primera catedrática de Derecho de la Universidad de Salamanca y una de las primera mujeres en ocupar un escaño en el Senado.
Gloria Bengué vivió en La Bañeza hasta que la inquietud por el saber la llevó a matricularse en Derecho en la Universidad Complutense de Madrid, graduándose en Derecho y Ciencias Económicas a la vez. Posteriormente, viajó a Chicago para continuar sus estudios y conseguir el doctorado en 1961. Dos años después regresa a Madrid donde es profesora adjunta de Economía Política y Teoría Económica en la Complutense.
Solo está allí un año, porque en 1964, la Universidad de Salamanca la incorpora como catedrática en Economía Política y Hacienda Pública de la Facultad de Derecho. La Universidad de Salamanca y especialmente la Facultad de Derecho vivieron una época gloriosa en las décadas de los 50 y 60, casi un segundo Siglo de Oro.
Todo arranca en el curso de 1953-1954 se celebró el VII centenario de la Universidad de Salamanca al cual asistieron más de 70 representantes de universidades de todo el mundo, un gran apoyo para la recuperación. Ese mismo curso, en octubre de 1953 el rector, Antonio Tovar anuncia que la Universidad de Salamanca le otorgará al dictador Francisco Franco el doctorado honoris causa. (que le fue retirado en 2008)
A pesar de la época en la que se encontraba España, durante estos años nuestra Universidad contaba con grandes profesores como el propio rector Antonio Tovar, el ex-rector Ramos Loscertales y los profesores Guillermo Arce, Miguel Artola, Norberto Cuesta, García Blanco, Maluquer, Ruiz-Giménez, Granjel, Tierno Galván, Zamora Vicente,… Todos ellos, compañeros de Gloria Begué
Este elenco de profesores dio prestigio a la Universidad de Salamanca y comenzó a crecer considerablemente, aunque lo más trascendente es el crecimiento internacional. A Salamanca comienzan a venir muchos extranjeros a estudiar. Este crecimiento es notable entre los años 50 y 70.
Begué, la política
Gloria Begué decidió con los primeros albores de la Democracia presentarse a las elecciones y consiguió escaño. Desde julio de 1977 fue senadora en la Cortes Constituyentes apostando fielmente por la Educación, y negándose a que ésta fuese privatizada. Al terminar la Legislatura se convirtió en directora del Instituto Regional de Castilla y León.
En 1980 fue elegida magistrada del Tribunal Constitucional por el Senado, contando con el apoyo del PSOE y siendo propuesta por UCD. Es elegida vicepresidenta de este Tribunal en 1986 con ocho votos a favor y cuatro en blanco, gracias a esto, presidió la Segunda Sala del Tribunal. Por aquel entonces era la única mujer en el Tribunal Constitucional.
A pesar de sus diversas ocupaciones, Begué continuo actuando como ponente en más de cien sentencias, como por ejemplo en la del derecho al trabajo, en la presunción de inocencia, la objeción de conciencia, o la autonomía universitaria. También despenalizó parcialmente el aborto.
Tras 9 años como magistrada en febrero de 1989 cesa tanto en su cargo de magistrada como de vicepresidenta del Tribunal Constitucional.
Tras esto decide regresar a la Universidad de Salamanca a continuar ejerciendo su labor docente como catedrática y directora del Departamento de Economía Aplicada.
Gloria Bengué se jubila en 2001, tras 32 años regalando su sabiduría.
En el año 2004 Universidad de Salamanca le concede la medalla de la Universidad qué es el máximo galardón que se otorga una persona o institución, como agradecimiento a su trayectoria académica.
Gloria Begué presidió la Junta Gestora del Instituto de Cuestiones Internacionales y fue miembro del Consejo Científico del Instituto Europeo de España, mientras que también lo era del Consejo para el Debate sobre el futuro de la Unión Europea. Cabe resaltar que también fue la primera mujer en acceder a la Academia de Ciencias Morales y Políticas.
Falleció el 27 de diciembre de 2016 a los 85 años en Madrid, tras una vida de logros académicos, y hacerse un hueco tanto en la dictadura de Franco como en la Democracia siendo una mujer pionera en muchos aspectos.
