La mesa de porcino ibérico no cambia el paso en Salamanca y volvió a cotizar al alza, una semana más, con una subida de 0,01 euros para el cebo y el cebo de campo, con un debate que mostró los “dos mundos diferentes” en los que viven ganaderos e industriales.
La noticia también estuvo en la presencia de Luis Ramos, hijo del industrial de Guijuelo fallecido hace semanas de forma repentina, quien ha tomado el testigo de su padre, llevándose un recuerdo por parte de todos los vocales de la mesa.
En lo que al debate se refiere, el propio Luis Ramos señaló que ésta ha sido la semana “con menor sacrificio de todo el año. El cerdo gordo está más equilibrado, pero los precios son altos para llevar al matadero. Hay una gran incertidumbre y meter lechones a estos precios es
Isidoro Blázquez, por su parte, indicó que el cebo de campo “es el más perjudicado y no hay venta, está paralizado. Los lechones tienen más igualdad y lo que peor está son el marrano y el primal, algo que ya viene de atrás”.
Goyo Sánchez apeló a la estabilidad “con el fin de esperar a ver qué pasa en el mes de septiembre y será el tema socioeconómico lo que marcará el futuro de todo”, en una opinión unánime por parte de todo el sector comprador.
Por su parte, los ganaderos aseguraron que en lo único que están de acuerdo con los ganaderos es en “la incertidumbre por ver cómo está el ambiente. El mercado es el que es y la oferta y la demanda, también. Los cerdos, a día de hoy, están muy buscados y demandados y existe una mayor demanda que los que hay en el mercado. Todo esto provoca que haya alguien que no pueda matar cerdos, porque no hay para todos. Y creo que hay que reflejar lo que toca esta semana, con una subida que no debe ser leve. En los lechones, el tema está un poco más pesado, pero va en sintonía con lo que estamos haciendo”, dijo Emilio Casaseca.
Miguel Ángel Flores explicó que se nota “cierta estabilidad, pero sí es cierto que para matar los cerdos no existe ningún problema, con un lechón que está un poco más pesado”.
Tomás García, por último, indicó que ambos sectores “viven en dos mundos diferentes, y con los industriales solo comparto la palabra incertidumbre. La mayoría de los cerdos está en industrias y fábricas, pero los cerdos libres valen más de lo que marca la Lonja, hasta el punto de que se hacen operaciones a la mínima de Extremadura, que está por encima de la máxima de Salamanca”.
A la hora de cotizar, los industriales pidieron una clara repetición de precios, mientras que los ganaderos solicitaron una subida de 0,03 euros para cebo y cebo de campo, para una decisión final de +0,01 euros para ambas categorías.
Para los lechones, la mesa fijó una repetición de precios por unanimidad de la mesa, igual que los marranos, mientras que los tostones subieron un euro ambas categorías.
Ante esta situación, el industrial Isidoro Blázquez, se mostró contrariado por la decisión del presidente y explicó: “Si hubiésemos pedido nosotros de una manera impropia, ¿hubieses hecho media? No me parece correcto lo que has hecho”.
Porcino blanco
En cuanto al porcino blanco, una semana “más de verano, donde el equilibrio entre oferta y demanda es la tónica fundamental. Mientras las temperaturas estén por encima de lo normal, todo seguirá así, y para toda la Lonja”, con una repetición de los precios.