La raza Morucha, autóctona de la provincia de Salamanca, iba a ser otra de las ganaderías protagonistas de la Exposición de Ganado de Salamaq 2020, con 14 ganaderías y 106 animales, Su presidente, Jesús Castaño, analiza la suspensión del certamen, que considera como «responsable».
No en vano, este hecho supone un contratiempo para el ganadero por el trabajo realizado, pero la pandemia que asola a España ha hecho que esta decisión sea un mal menos. Ésta es la opinión del presidente de este colectivo, Jesús Castaño:
Responsabilidad: «Nosotros apoyamos en junio (Castaño aún no era presidente) la decisión de la Diputación de celebrar la feria ganadera, porque Salamanca es la provincia de vacuno por excelencia del país y porque había que intentar que se celebrase por el escaparate que supone para todos. Pero, con el paso del tiempo, hemos visto que no se podía abordar esta situación por los problemas de mucha gente del norte que tenía que venir y, en caso de un positivo, podría tener problemas para regresar a su lugar de origen. También tenían que reservar hoteles… y demás gastos. La decisión de no celebrar esta feria ganadera creo que apela a la responsabilidad y al esfuerzo de todos por lo que está pasando».
Sin relaciones comerciales: «Una feria como ésta sirve, fundamentalmente, para establecer relaciones comerciales con otros ganaderos o profesionales del sector, además de dialogar mucho, y con esta situación, esto iba a ser casi imposible; carecía de sentido».
Tardanza en la suspensión: «Creo que se ha esperado tanto para optar por esta medida porque nadie imaginaba en el mes de junio, que íbamos a estar así ahora. Si la feria se celebrase en octubre o noviembre, se hubiese anunciado hace mucho tiempo su suspensión, como ha ocurrido con otras; pero al ser en septiembre, nadie iba a imaginar que la segunda ola iba a ser tan pronto«.
Decepción: «Para el ganadero es un problema porque ha tenido una serie de gastos antes de la feria derivados de la preparación de los animales, el saneamiento… llevamos tres meses con estos animales para que estuviesen listos para el certamen, aunque la Diputación si mantendrá las ayudas que nos iba a prestar con la celebración de la feria. La suspensión no es un fracaso, pero sí una decepción para nosotros».