Más de 26.000 euros están a punto de ‘perderse’ en la provincia de Salamanca si nadie los reclama porque se encuentran en vía de prescripción.
Al menos eso es lo que señala la Resolución Oficial publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), que revela que se trata de un documento de la Delegación de Economía y Hacienda en Salamanca, en relación con la prescripción de depósitos en abandono.
«De los antecedentes obrantes en la Sucursal de la Caja General de Depósitos en esta Delegación, se desprende que ni los propietarios ni sus causahabientes, en su caso, de los depósitos en efectivo constituidos en aquella hace mas de 20 años, que luego se relacionan, han efectuado acción alguna de dominio sobre los mismos, por cuanto, de acuerdo con lo establecido en el artículo 18 de la ley 33/2003, de 3 de noviembre del Patrimonio de las Administraciones Públicas (BOE de fecha 4/11/2003)», publica la resolución.
Ante esta situación, «resulta procedente considerar los referidos depósitos en efectivo como bienes abandonados en prescripción, y, por ende, pertenecientes a la Administración General del Estado«.
No en vano, durante el plazo de un mes, a contar desde el día siguiente al de publicación de este anuncio en el Boletín Oficial del Estado (BOE), «los interesados podrán presentar reclamación justificando la interrupción del periodo de prescripción antes de su vencimiento (20 años, contados a partir del día siguiente al de constitución de cada uno de los depósitos), dirigida e esta Delegación de Economía y Hacienda en Salamanca, Sucursal de la Caja General de Depósitos».
La fecha de creación de los depósitos se sitúa entre el 29 de enero de 1999 y el 22 de diciembre del mismo año, con cantidades que oscila entre 604,94 euros y 9.422 euros, para un montante económico total de los 13 de pósitos de 26.414 euros que… ¿alguien reclamará?
