[dropcap]N[/dropcap]o hay mal que por bien no venga. Quizá a ella no se lo parezca tanto, pero lo cierto es que desde que Paloma Cuevas y Enrique Ponce pusieran fin a más de un cuarto de siglo de noviazgo y matrimonio, la sociedad en general ha descubierto a una Paloma Cuevas dinámica, graciosa, entregada a su familia y amigos,…
La imagen que proyectaba Paloma Cuevas era de una mujer delicada y elegante, ahora ofrece esa misma retrato mucho más completo y generoso.
Prueba de ello es que en su última publicación, ella comparte una imagen con una de sus hijas, tiene dos fruto de su relación con Enrique Ponce, Bianca y Paloma. Junto a la imagen escribe. Si vas a tirar la toalla…que sea en la playa. Toda una declaración de intenciones.
Una de las personas que le dice que le ha gustado esta afirmación es Sara Carbonero. Paloma Cuevas le responde: «Eres un gran ejemplo para todos, preciosa».
Dice un dicho que el movimiento se demuestra andando y un refrán que para muestra un botón, el comportamiento que ha presentado Paloma Cuevas en estos meses desde que por su vida paso el sunami de la separación con el padre de sus hijas y posterior romance del torero con la universitaria, ha sido exquisito.