La consejera de Sanidad, Verónica Casado, aseguró este lunes que “la estrategia de Atención Primaria sigue” en marcha para afrontar una situación “crítica” y que se ha dado hoy el “pistoletazo de salida” a un proyecto, que según dijo cuenta con el aval del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco. No obstante, sostuvo que la reordenación no supondrá el cierre de consultorios o el traslado de médicos del medio rural al urbano.
Ical.- Casado, que se reunió este lunes con los presidentes de las diputaciones provincias y la Federación Regional de Municipios y Provincias (FRMP), destacó que no se siente desautorizada y que no puede retirar el plan de reestructuración de la Atención Primaria, como se aprobó en las Cortes, porque no existe ya que su propuesta trata de mejorar y reforzar el servicio. “No puedo retirar nada que no haya”, sentenció.
De esta forma, la titular de Sanidad, que explicó que esta estrategia de reordenación de la Atención Primaria parte de los trabajos con los grupos de expertos y técnicos, cuenta con el respaldo de Fernández Mañueco, quien dijo conoce los diferentes puntos incluidos en el proyecto, ya que añadió que ahora su departamento lo que plantea es el desarrollo de los trabajos hechos, en los que indicó participó el procurador ‘popular’ Alejandro Vázquez.
Verónica Casado vinculó el paso de la Comunidad a partir de mañana a nivel uno de riesgo por el COVID a que surjan problemas pendientes como la reordenación de la Atención Primaria, después de que el Grupo Popular votara una iniciativa socialista que pedía la retirada del denominado plan de reestructuración de este nivel asistencial. “Todo es reconducible”, dijo si todos tienen claro el consenso y la necesidad de “trabajar todos juntos y hacer política sanitaria con mayúsculas”, con el fin de lograr las “mayores cuotas” de salud.
La consejera, que indicó sigue pendiente de recibir una respuesta a su carta enviada al líder del PSCyL, Luis Tudanca, defendió su continuidad al frente de Sanidad porque señaló cuando un barco se hunde los primeros en abandonarlo son las “ratas” y ella aseguró tiene la intención de trabajar para mejorar todo el sistema. Además, apuntó que no tiene la percepción de que se vayan a adelantar las elecciones autonómicas, tras lo dicho por el presidente y por el vicepresidente y portavoz, Francisco Igea. No obstante señaló que en política prefiere no tenerla, para no llevarse un “chasco”.
Además, Verónica Casado defendió que en estos 18 meses de la “peor” pandemia han “demostrado” que “son capaces de planificar” y de afrontar situaciones “muy complejas” que requirieron reestructura todo el sistema, hasta disminuir un 80 por ciento las hospitalizaciones, un 75 por ciento los ingresos en la UCI y un 90 por ciento los fallecimientos. Esto, añadió, fue posible gracias a medidas no sanitarias y a una de las “mejores” campañas de vacunación del país.
Asimismo, explicó en su comparecencia que la Consejería trabaja en varias líneas generales, entre las que citó la estrategia de reordenación y refuerzo de la Atención Primaria, el refuerzo de la Atención Continuada, la formación de los profesionales, la digitalización y la mejora de los sistemas de información. Además, apuntó que al mejorar la evolución de la pandemia se amplían la presencialidad en las consultas, algo que recordó se inició en mayo.
Complicidad
La consejera aseguró que cuenta con una “complicidad total y absoluta” por parte de los presidentes de las diputaciones provinciales con las que se reunió este lunes y a los que agradeció la disposición a seguir trabajando. En esta cita, que consideró “fructífera”, Casado justificó la presencia de Igea, al ser el portavoz del Ejecutivo y por haber estado “apoyando” el proyecto. Además, explicó que pidió “consenso” y “colaboración” a los presentes.
Al respecto, negó que hubiera reconocido en el transcurso del encuentro que se había equivocado, sino que en estos 18 meses han tenido que hacer un trabajo «intenso», «como si no hubiera un mañana», para «torcer» la curva del COVID-19 y preparar esta estrategia. «No he dicho que me haya equivocado», dijo, si bien señaló que ahora se retoman los problemas que existían antes de que apareciera el coronavirus.
A partir de ahora, remarcó Verónica Casado, se buscará el consenso en el territorio con reuniones entre los gerentes de área, los alcaldes y estos dirigentes provinciales. La orden, dijo, es que comienzan a trabajar esta semana y la que viene, para aterrizar las propuestas en cada zona, ya que reconoció que no habrá “soluciones comunes”. Además, se celebrarán otras reuniones con sindicatos, sociedades científicas y los colegios profesionales, si bien de momento apuntó que no ha recibido respuesta de los socialistas.
“Estamos en una carrera contrarreloj”, afirmó Verónica Casado. “Para esto hemos venido”, agregó y apostó por actuar ya y no relegar los problemas, que advirtió ya no son aplazables, fruto de la edad avanzada de los profesionales, la falta de sanitarios y de una reordenación que recordó se mantiene desde los años 80. Además, avanzó que el 21 de septiembre mantendrá un encuentro con los consejeros de Sanidad de Aragón y Castilla-La Mancha, ambos socialistas, para analizar el impacto de la despoblación en este ámbito.