El sindicato de Enfermería Satse denunció este jueves que la Junta de Castilla y León haya anunciado en los medios de comunicación, «sin una información previa a los representantes de los trabajadores», que pretende instalar unidades móviles de test para la detección de antígenos con personal ajeno a la propia Gerencia de Salud de la Comunidad.
Satse, en un comunicado remitido a Ical, advierte que estas determinaciones diagnósticas deben hacerse por profesionales cualificados para ello y no por cualquier otro personal que «podría invalidar o restar fiabilidad» al resultado de la prueba.
En anteriores ocasiones, según recuerda Satse, se contó con una bolsa de enfermeras voluntarias de Sacyl que, en sus días libres, acudían a realizar estos cribados a los lugares de vacunación masiva en plena campaña. Ahora, anuncian que será personal ajeno a Sacyl y el propio presidente del Gobierno autonómico ha dicho que se realizarán por personal no sanitario.
Desde Satse instan por ello a la Junta y a la Consejería de Sanidad a que reactive estas bolsas de voluntarios para disponer de un número de profesionales cualificados importante a la hora de iniciar esta campaña y no derivar fondos a entidades privadas para «convertir el coronavirus en un negocio».