Ante el avance de la variante ómicron, muchos optan por someterse a pruebas de antígenos para saber si están contagiados o no. Sin embargo, pueden producirse “falsos negativos” debido al tiempo que tarda en dar positivo un contagiado con la nueva variante.
Según un estudio realizado en Noruega, un contagio por la variante ómicron tarda tres días en incubarse. Es decir, el período medio de incubación de esta cepa es de tres días, mientras que en el caso de la cepa delta es de cinco, tras estar en contacto estrecho con un positivo. Por lo tanto, el resultado de una prueba de antígenos puede variar en cuestión de horas.
Michael Mina, epidemiólogo y profesor en la Universidad de Harvard, reconoce el cambio en los períodos de incubación. Por ello, recomienda extremar la precaución con los resultados de las pruebas de antígenos. En un gráfico compartido en Twitter, Mina explica que “la relación entre los síntomas y la carga viral ha cambiado” debido a las vacunas. También asegura que quienes dan negativo pese a tener síntomas ya que esto es “el resultado de la respuesta del sistema inmune” a la infección “y no el propio virus”.
En este sentido, numerosos expertos recomiendan repetir los test de antígenos durante varios días seguidos, para asegurar el negativo. También explican que estos diagnósticos no sustituyen en ningún caso a la prescripción de un médico. Por ello, en el caso de presentar síntomas, se debe acudir a un especialista.