A pesar de lo que se pueda pensar, no todos los pasteles son ‘bombas calóricas’. Esto se debe a que gracias al empleo de unos ingredientes saludables se puede conseguir que la ingesta de algunos platos ayude a bajar de peso.
Cualquier receta que contenga elementos que solidifiquen o cuajen todos sus componentes se pueden llamar pastel. Por tanto, no siempre este término hace referencia a los platos dulces que aportan innumerables calorías al cuerpo. En este sentido, con una combinación de ingredientes adecuados se pueden elaborar pasteles que ayuden a bajar de peso.
En esta receta, el ingrediente principal es el calabacín, un alimento rico en agua y fibra, por lo que mejora la digestión y el tránsito intestinal. Para preparar este pastel se necesitan los siguientes ingredientes:
3 calabacines.
2 cebollas.
100ml de leche.
100ml de nata.
3 huevos.
Y además, queso parmesano rallado, orégano, AOVE, sal y pimienta.
Pasos:
- Cortar las cebollas en juliana. En una sartén a fuego medio con un poco de aceite, añadir la cebolla picada y un poco de sal y pimienta. Cocinarla durante 10 minutos y retirarla del fuego.
- Lavar los calabacines y cortarlos en rebanadas finas. Cocinarlo en una sartén durante 8 minutos.
- Batir los huevos hasta que espumen un poco. Añadir la nata, la leche, la sal y el orégano. Mezclarlo todo muy bien.
- Añadir la cebolla y el calabacín a la mezcla.
- Verter todo en un recipiente apto para el horno, espolvorear el queso rallado y hornear a 180°C durante 30 minutos.