La ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, respondió hoy al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que la competencia en materia de incendios forestales es de la Comunidad desde 1984, si bien aseguró que el Gobierno acepta revisar y abrir un debate sobre la forma en que España hace frente a una emergencia de este tipo, dado el cambio climático.
Ical.- Rodríguez respondió a la petición de Fernández Mañueco de celebrar, tras el verano, una Conferencia de Presidentes extraordinaria para abordar la coordinación entre administraciones en materia de incendios forestales, y lo emplazó a la reunión que mantendrá el 28 de julio con Pedro Sánchez en La Moncloa.
Además, Isabel Rodríguez aprovechó para hacer un “recordatorio”, puesto que indicó que la competencia en materia forestal y extinción de incendios es una materia reservada a las comunidades”, por lo que el Gobierno lo que hace es un refuerzo y apoyo dependiendo de los niveles, al igual que el sistema de emergencias europeo.
De esta forma, la ministra portavoz destacó que Castilla y León ha recibido apoyo de medios del Estado y de otras comunidades vecinas tanto en los incendios registrados durante la primera ola de calor a mediados de junio, como en esta segunda un mes después. Por ello, a pesar del “orgullo” que genera el sistema de Protección Civil, abogó por debatir sobre el refuerzo de medios, la continuidad del personal o sobre cuándo deben comenzar las campañas.
Mañueco, en su línea
Mañueco dijo este martes pro la mañana que pedirá al Gobierno que, después del verano, convoque la Conferencia de Presidentes Extraordinaria para analizar cómo mejorar la coordinación de los servicios de extinción de incendios, cómo afrontar el futuro por la «anomalía climática excepcional» y adoptar, finalmente, las medidas «de prevención y de extinción necesarias».
El presidente autonómico consideró que las “anomalías climáticas” han provocado los devastadores incendios que a esta hora afectan no solo a provincias como Ávila, León o Zamora, sino a otras zonas de España y Europa. “Vivimos una anomalía climática porque las olas de calor son cada vez más frecuentes; empiezan antes; acaban más tarde; duran más días; y tienen más intensidad. Estas circunstancias nos invitan a reflexionar sobre la necesidad de aumentar los medios técnicos y operativos”, justificó para remarcar: “Esto es un efecto global y nacional que transciende las fronteras del país”.
