Ferrovial ha decidido diversificar su actividad y esta semana se ha metido en política anunciando que se marcha de España para fijar su sede en Países Bajos, después de nacer, crecer y desarrollarse gracias a las obras públicas por todo el país. También en Salamanca.
Dos de las seis principales constructoras españolas sancionadas en 2022 con una multa multimillonaria por la Comisión nacional delos Mercados y Competencia (CNMC) por repartirse los contratos de obra pública en España, han obtenido suculentos proyectos en Salamanca.
Una de ellas es FCC y la otra, Ferrovial, que es una asidua a los contratos de obra pública en Salamanca. Algunos de sus negocios han sido muy destacados y no siempre con buen resultado.
Ferrovial ha ejecutado las obras de reforma de La Alamedilla, el vial de acceso al nuevo hospital por 6,5 millones y la construcción en 2008 del tramo de la A-66 entre Guijuelo y Sorihuela, un tramo de 11 kilómetros que costó 26 millones que ya ha tenido que ser rehabilitado (se invirtieron 3 millones más en ese tramo en 2021).
También construyó el parque Elio Antonio de Nebrija y se adjudicó en 2020 las obras para renovar la calle de rodaje de Matacán por 1,6 millones.
Lo más reciente ha sido la reforma (destrozo) del Cerro de San Vicente, que ha costado, de momento, dos millones de euros.
En 2014 el Ayuntamiento de Salamanca dio el visto bueno a la propuesta de adjudicación para el comienzo de las obras del parque Elio Antonio de Nebrija, en Salas Bajas, por medio millón de euros.
