Un incidente con un frasco de colonia impidió al exportero Santi Cañizares, que jugó en el Valencia, el Celta o el Real Madrid, y que en la actualidad es tertuliano en varios medios deportivos, estar presente en la concentración previa al Mundial de Corea y Japón 2002.
El exguardameta no pudo viajar con sus compañeros para disputar el torneo porque un fragmento del recipiente hizo que le tuvieran que intervenir de urgencia después de que le seccionara un tendón. “Llamó mucho la atención que un tío sea tan tonto que se le caiga un bote de colonia en el pie y lo tengan que operar de urgencia”, recuerda en el podcast de Siro López.
Cuando sucedió el imprevisto, los rumores no tardaron en llegar. “Había mil personas opinando. Se especuló con todo tipo de cosas. Que si estaba de copas, que si me había escapado, que si tenía un tío o una tía en el hotel… Había un mejunje de todo tipo de relaciones sexuales, heterosexuales, homosexuales, de fiesta dentro y fuera del hotel…”, relata Cañizares.
También explica que el hotel en el que ocurrió el incidente estaba protegido por la Guardia Civil debido a las amenazas de ETA, por lo que era imposible organizar fiestas en él. “Por aquel entonces, la selección estaba amenazada por ETA y había un cordón policial. De hecho, el bote de colonia me lo compra el doctor Genaro Borrás, que en paz descanse. No había forma de organizar una fiesta en el hotel, lo mejor era meterte en una habitación y echarte unas risas”, señala.
La anécdota de su operación de urgencia tras la mala jugada del frasco roto es algo que parece haber quedado para la posteridad en su carrera deportiva. “Hoy en día, la gente aún me pregunta qué pasó realmente con el bote de colonia”, apunta.
