[dropcap]T[/dropcap]engo 84 años, la mitad de mi vida la viví en una dictadura y la otra, en democracia. Durante la primera etapa, no podía participar, en la segunda he ido a votar cada vez que ha habido elecciones, sin faltar ni una en estos 40 años. Nos dijeron que era nuestro deber y me lo tomé al pie de la letra. Se lo he inculcado a mis hijos y ellos también han votado en los comicios electorales.